De las 20.000 personas retenidas en uno de los centros este año sólo 14 han solicitado asilo
SANTA CRUZ DE TENERIFE.- Representantes de organizaciones no gubernamentales han advertido de que se analiza la sangre a los inmigrantes irregulares sin su consentimiento y no se les informa del derecho de asilo, mientras que el eurodiputado Manuel Medina ha negado este extremo y ha considerado que el trato es excepcional.
De las 20.000 personas retenidas en uno de los centros este año sólo 14 han solicitado asilo
SANTA CRUZ DE TENERIFE.- Representantes de organizaciones no gubernamentales han advertido de que se analiza la sangre a los inmigrantes irregulares sin su consentimiento y no se les informa del derecho de asilo, mientras que el eurodiputado Manuel Medina ha negado este extremo y ha considerado que el trato es excepcional.
Estos son parte de los asuntos, que han tratado en una reunión que se prolongó durante dos horas y media, los representantes de varias organizaciones no gubernamentales que atienden a los inmigrantes y la delegación de diputados de los países ACP (África, Caribe y Pacífico) y del Parlamento Europeo que visita Canarias.
El eurodiputado socialista Manuel Medina ha declarado al término de la reunión que los asuntos tratados «han abierto un frente» que la delegación comprobará en su visita a los centros de retención de inmigrantes clandestinos en Tenerife.
No obstante, Medina ha considerado que la delegación viene de Malta «y allí las condiciones de acogida son mucho peores, por lo que están asombrados» del trato que se dispensa a los inmigrantes en España, y particularmente en Canarias.
Carlos Arroyo, de la Junta Directiva de Médicos del Mundo en Canarias, ha declarado que se han efectuado más de 3.000 análisis «de forma ilegal» a inmigrantes irregulares, a los que miembros de la Policía Nacional extraen sangre sin su consentimiento y sin informarles del resultado de la analítica.
Arroyo ha asegurado que aunque se haya detectado alguna enfermedad grave se repatría a los inmigrantes a su país de origen o se les envía a la Península sin ser informados de que padecen una patología, lo que a su juicio «es una vulneración clara de los derechos humanos».
Se ha preguntado además cómo a los diputados no les llama la atención el hecho de que de las 20.000 personas retenidas en el centro de Las Raíces a lo largo de este año sólo 14 hayan solicitado el asilo, y ha lamentado que «todo el mundo mira para otro lado y la realidad es que no hay traductores, ni abogados especialistas» en esta materia.
También ha asegurado que le ha llamado la atención el que un diputado asistente a la reunión haya comentado que no se puede hablar del derecho de asilo porque los inmigrantes llegados a Canarias «son refugiados económicos».
Tráfico de personas
El representante de Médicos del Mundo ha replicado al parlamentario que los inmigrantes son víctimas «de la trata y tráfico de personas por parte de las mafias y si eso no da derecho al asilo, entonces qué lo va a dar».
En su opinión, «ofende» que un diputado plantee esta cuestión cuando la realidad consiste en que nadie pregunta a los inmigrantes si proceden de Costa Marfil o si es homosexual y es perseguido por ello.
En la reunión sí hubo coincidencia, en su opinión, en cuanto a que los inmigrantes que no son repatriados no pueden quedar en situación de ilegalidad en España, al carecer de documentación que les de acceso a la sanidad pública y a un trabajo.
Ello implica crear una bolsa de exclusión social «provocada por el propio Gobierno», ha aseverado Carlos Arroyo, quien ha subrayado que el hecho de estar en situación irregular no supone negar los derechos de las personas.
Fuente: EFE