El gobierno anunció ayer por la tarde un recorte de 10.000 millones en Sanidad y Educación. Pese a la urgencia del mismo, pues quiere ponerlo en práctica este mes, no especifica qué hará. Expresa una apuesta por la “racionalización” y es cierto que en sanidad hay mucho margen para la misma.

Ya lo hemos explicado en otras ocasiones, pese a que el gasto farmacéutico en España
es enorme, es uno de los países que más consume medicamentos del mundo,
no se hacen estudios coste-eficacia de los fármacos que aplica la Seguridad Social y cuando algún organismo independiente lo ha hecho ha descubierto que por lo general, buena parte de los nuevos medicamentos muy caros de los que se dota el sistema sanitario no son recomendables por su

Ya lo hemos explicado en otras ocasiones, pese a que el gasto farmacéutico en España
es enorme, es uno de los países que más consume medicamentos del mundo,
no se hacen estudios coste-eficacia de los fármacos que aplica la Seguridad Social y cuando algún organismo independiente lo ha hecho ha descubierto que por lo general, buena parte de los nuevos medicamentos muy caros de los que se dota el sistema sanitario no son recomendables por su alto precio y porque suelen existir ya otros más baratos a disposición de la población.

Si se quiere recortar hay margen para recortar sin bajar las prestaciones
(¿por qué no hacer planes para reducir el sobrediagnóstico y
sobretratamiento de muchas enfermedades “de moda”?) pero no queda claro
que eso sea lo que se pretende. Lo cierto es que hay miedo en el gobierno a la reacción de la población si se tocan líneas rojas como la reducción de servicios o de personal y ello provoca contradicciones en las filas gubernamentales, en esta ocasión a cuenta del copago o repago, que es lo que es en realidad pues nuestra sanidad no es gratuita ya que la pagamos con nuestros impuestos. Por ello hay profesionales sanitarios que piden una financiación prudente de los fármacos antes que el copago.

Y la población está reaccionado, por ejemplo, interponiendo una denuncia por lo penal a los responsables de la sanidad pública catalana
por entender que están maniobrando especulativamente para beneficiar a
los intereses privados de los que en ocasiones forman parte. En breve
podríamos ver más denuncias de este tipo pues al parecer sobran los
motivos y si no veamos lo que sucede en Castilla-La Mancha, tres cuartos de lo mismo como publicaba ayer El Plural.

Cabe preguntarse si no será hipócrita recortar porque lo piden esos espectros modernos que han dado en llamarse los mercados en una sanidad que está siendo saqueada por esos mercados.

Con los recortes en derechos básicos como sanidad y educación ¿no tendremos en el futuro una población más embrutecida y con peor salud?
A lo mejor eso interesa al Poder; una sociedad de superviviencia en la
que los más fuertes, léase los más crueles, sobrevivan y paguen por
servicios privados sólo accesibles a esa parte de la población… y una ciudadanía entre enferma e insensible a su fatal destino por desconocimiento.

Alguien apunta en Twitter:

NO hay duda, sanidad y educación son las ofrendas a los mercados antes de que mañana vuelvan a operar. ¿Y si no les calma el sacrificio?

Miguel Jara – http://www.migueljara.com/2012/04/10/la-sanidad-que-se-ofrenda-a-los-especuladores/


Fuente: Miguel Jara