La Asamblea General de la ONU adoptó ayer con un estrecho apoyo, 50 votos a favor y 100 abstenciones, una resolución sobre el Sáhara Occidental, en apoyo del plan Baker, que reconoce el derecho de autodeterminación de los saharaui. La fuerte abstención puso de manifiesto el avance de la tesis marroquíes para encontrar una solución negociada al litigio. Esta situación forzará probablemente al secretario general de la ONU, Kofi Annan, a designar un nuevo representante especial, en sustitución del peruano Álvaro de Soto, con un mayor perfil político.


La Asamblea General de la ONU adoptó ayer con un estrecho apoyo, 50 votos a favor y 100 abstenciones, una resolución sobre el Sáhara Occidental, en apoyo del plan Baker, que reconoce el derecho de autodeterminación de los saharaui. La fuerte abstención puso de manifiesto el avance de la tesis marroquíes para encontrar una solución negociada al litigio. Esta situación forzará probablemente al secretario general de la ONU, Kofi Annan, a designar un nuevo representante especial, en sustitución del peruano Álvaro de Soto, con un mayor perfil político.

El comité de descolonización de la ONU votó en octubre la misma resolución, por 52 votos a favor y 89 abstenciones, lo que se interpretó como una victoria marroquí. Ayer, todos los países de la UE se abstuvieron, incluida España. El Consejo de Seguridad de la ONU prorrogó en octubre por seis meses su misión en el Sáhara y Annan informará de los progresos en enero. El Frente Polisario destaca que no haya habido votos en contra y su representante en la ONU, Amed Bujari, apuntó que «la posición española no ayuda a profundizar en la debida confianza hispanosaharui».

S. POZZI – Nueva York

EL PAÍS – Internacional