Los cinco grandes ganaron 15.350 millones de euros hasta septiembre, un 19,1% más
La crisis financiera mundial provocada por las hipotecas de alto riesgo de Estados Unidos ha pasado desapercibida para la banca española, o al menos, así lo parece si se miran sus resultados de los nueve primeros meses del año
Los cinco grandes ganaron 15.350 millones de euros hasta septiembre, un 19,1% más

La crisis financiera mundial provocada por las hipotecas de alto riesgo de Estados Unidos ha pasado desapercibida para la banca española, o al menos, así lo parece si se miran sus resultados de los nueve primeros meses del año

Los cinco grandes —Santander, BBVA, La Caixa, Caja Madrid y Banco Popular— se anotaron unos beneficios récord de 15.350 millones de euros (19,1% más) y continuaron con la senda de grandes crecimientos del último quinquenio, en el que han casi triplicado su beneficio.

Y lo que es más, las últimas cuentas no mostraron ninguna dificultad que no se viera ya en las del primer semestre, como la prevista desaceleración hipotecaria en España o el ligero aumento de la morosidad. Su confianza en la actual coyuntura es tal que todos ellos mantienen sus previsiones de resultados para este año y los siguientes.

Esa situación es muy diferente a la que viven muchos de sus grandes competidores internacionales, como Citigroup, Merrill Lynch, Credit Suisse, UBS o Bank of America, que han anunciado pérdidas millonarias o bajadas sustanciosas de sus beneficios derivadas de las ‘subprime’.

Los banqueros españoles explican que la dureza del Banco de España en la última década les ha dejado muy preparados para situaciones como ésta, que les ha pillado en buena situación de liquidez, sin activos de riesgo en su cartera y con niveles de morosidad históricamente bajos y muy inferiores a los de la banca italiana, estadounidense o alemana, por ejemplo.

Aun así, la banca española está en el punto de mira internacional, debido principalmente a su excesiva dependencia del negocio hipotecario en los últimos años y a su exposición al negocio con promotores inmobiliarios. Las propias entidades se quejan del trato que se les está dando en el extranjero y critican que no se premie la solvencia del sistema financiero español frente a la de los mercados de su entorno.

¿Crisis ? ¿Qué crisis ?

Las cuentas de los nueve primeros meses reflejan un aumento del 15,8% en el negocio crediticio y del 15,6% en la captación de recursos de clientes, cifras superiores a los ingresos por comisiones, que avanzaron un 10,6%.

En esas cuentas récord, destacan los 1.920 millones de euros conseguidos en plusvalías extraordinarias con la venta de participaciones industriales, que siguen siendo un gran acicate de sus resultados.

Santander se mantuvo en el tercer trimestre como primera entidad española por beneficios, a mucha distancia de sus competidores, con unos beneficios de 6.572 millones de euros (un 32,9% más). La que más creció en el periodo fue, sin embargo, Caja Madrid, que ganó un 44,3% (1.267 millones) gracias a los 200 millones ganados con la venta de parte de sus acciones de Realia.

El sector mantiene sus previsiones de crecimiento para el resto del ejercicio, en el que se embolsarán conjuntamente unos beneficios de unos 25.000 millones, con aportaciones muy significativas de las plusvalías extraordinarias, que superarán los 6.000 millones.

Los salarios crecen siete veces menos

Con o sin crisis, la banca sigue incrementando los beneficios a un ritmo que nada tiene que ver con el de los salarios de sus empleados.

Los resultados los nueve primeros meses aumentaron, porcentualmente, siete veces más que la inflación, que es el indicador que las entidades utilizan habitualmente para subir los salarios.

Si se miran las cifras de los últimos cinco años la diferencia es más patente todavía, porque los salarios han subido un 15,8% mientras que los beneficios han aumentado un 188%, es decir, las ganancias crecen doce veces más que los sueldos.

Los sindicatos aprovechan cualquier ocasión para reclamar que las entidades trasladen a sus plantillas parte de esos “desorbitados” beneficios, pero éstas siempre se niegan.

En los últimos años, han conseguido sólo que en los convenios se incluya un cuarto de paga más cada año y algún bonus extraordinario, como las 100 acciones regaladas por Santander en su 150 aniversario o las 200 entregadas por La Caixa en la OPV de Criteria.

Efectos de una crisis. Los clientes sí notan las turbulencias

1.- Conseguir un crédito es más difícil que antes del verano

Los clientes particulares empiezan a resultar perjudicados por la crisis financiera. Las entidades analizan ahora mucho más la concesión de créditos y empiezan a aumentar los diferenciales sobre los tipos de interés, a lo que hay que añadir la subida del euribor.

2.- Los promotores, bajo lupa

Los promotores inmobiliarios tienen serias dificultades para que la banca les financie. Ahora se mira con lupa los proyectos de construcción debido a las dudas sobre cuál será la magnitud de la desaceleración en el sector de la construcción y la posible bajada de los precios de la vivienda.

3.- Los depósitos son más rentables

Los usuarios pueden ahora sacar más rendimiento a sus ahorros, porque las entidades financieras necesitan captar liquidez a cualquier precio y están iniciando una guerra de pasivo en la que están dispuestas a pagar mucho más caro que antes de la crisis.


Fuente: publico.es