La sucesión de despidos que se vienen produciendo durante los últimos tiempos en Unísono es más que preocupante. Afectando a todas las provincias donde Unísono tiene centros de trabajo y a casi todos los clientes, pero en especial a ORANGE, IBERDROLA, VODAFONE y GAS NATURAL.

Unísono es una empresa
de capital español con centros de trabajo en Madrid, Gijón, Vigo y
Valencia, también cuenta con 2 centros de trabajo en Santiago de
Chiles (Chile) y uno en Bogotá (Colombia).

Unísono es una empresa
de capital español con centros de trabajo en Madrid, Gijón, Vigo y
Valencia, también cuenta con 2 centros de trabajo en Santiago de
Chiles (Chile) y uno en Bogotá (Colombia). Su Actividad es el
telemarketing y por facturación ocupa uno de los primeros lugares de
las del sector, habiendo superado durante el año 2010 la cifra de
112 millones de euros, lo que supone un crecimiento dl 34% y un
beneficio que casi alcanza los 6 millones de euros, duplicando
prácticamente los obtenidos en el año anterior

Desde principio de 2011 y
hasta finales de verano CGT calcula que se habrán perdido cerca de
1.500 puestos de trabajo, siendo especialmente grave la situación en
Vigo, donde se pasará de una plantilla que ha llegado a superar en
algunos momentos los 1.000 trabajadores a poco más de 300 a finales
de julio. En el resto de centros la situación no es mucho mejor, a
los 5.646 trabajadores que la empresa reconocía a finales de 2010
hemos pasado a 5.157 en solo seis meses y que después de los
despidos anunciados ya por la propia empresa para el mes de julio
apenas superará los 4.000 trabajadores.

A nadie se le oculta que
estos despidos vienen propiciados, además, por la deslocalización
que la propia Unísono está realizando para muchos de sus servicios,
trasladándolos a un precio menor a los centros de Chile y Colombia.
Es decir: una vez que se han aprovechado del trabajo de los
trabajadores que han levantando las campañas, trabajadores que han
creado y perfilando los procedimientos con su trabajo diario, una vez
que han recibido por parte del Estado y las Comunidades Autónomas
todas las subvenciones habidas y por haber para facilitar nuevas
contrataciones, cuando ya han conseguido todo eso deciden llevarse el
servicio a otros países.

Desde CGT nos oponemos
frontalmente a esta actitud cicatera y miserable de la empresa, que
en nada tiene que ver con la cacareada crisis si no con el afán de
conseguir mayores beneficios aun a costa de seguir destruyendo
empleo.

Sección Estatal de CGT
en Unísono Soluciones de Negocios SA