Indignación entre los trabajadores
El Banco de Santander, con el rechazo de CGT y UGT y con la incondicional adhesión de CCOO y un sindicato amarillo auspiciado por la empresa (FITC), ha eliminado el transporte colectivo de empresa, en la ciudad financiera.
Indignación entre los trabajadores

El Banco de Santander, con el rechazo de CGT y UGT y con la incondicional adhesión de CCOO y un sindicato amarillo auspiciado por la empresa (FITC), ha eliminado el transporte colectivo de empresa, en la ciudad financiera.

Los votos en el comité de empresa de la ciudad financiera aportados por CGT y UGT sólo son uno menos que los que representa la alianza de FITC-CCOO (13 frente a 14).

Resulta incomprensible que el mismo día que el banco anuncia en prensa que hasta junio ha ganado 4.458 millones de euros acuerda la firma con CC.OO y el sindicato amarillo de la empresa -en contra de la opinión de los empleados, que se han concentrado dos veces frente al edificio presidencial de la ciudad financiera, que han realizado campañas de recogida de firmas y que han realizado envíos masivos de correos a la empresa y a los sindicatos firmantes- la supresión del transporte colectivo de empresa. Causando, dado la lejanía de Madrid de este centro de trabajo y la raquítica oferta de transporte público un grave perjuicio a unos 1.000 empleados que utilizan a diario del transporte de empresa.

El motivo de esta felonía lo desconocemos. Imaginamos, que por el lado de la empresa, como siempre se trata de reducir costes, sin tener en cuenta el perjuicio causado a los empleados. Esto no es muy dificil de entender, como tampoco es dificil entender que un sindicato amarillo «trabaje» para la empresa que le mantiene.

Lo dificilmente compresible es discernir hasta donde están dispuestos a llegar en CCOO. Ha cambio de no sabemos qué, están dispuestos a secundar cualquier propuesta de la empresa (aunque esto suponga un drástico deterioro de las condiciones de trabajo), haciendo oidos sordos, ignorando las protestas, de los trabajadores a los que dicen representar.

Si en el Santander, todavía alguien albergaba dudas sobre la trayectoria de este sindicato, desde la firma de este vergonzante acuerdo, las cosas están, si cabe, aun más claras.

Sirven a la empresa, de la que reciben favores y prebendas. No nos llamemos a engaño : Sólo están para esto, este es su papel en la escena laboral. Su único compromiso es con la empresa, su única preocupación hacia los trabajadores los trabajadores es que aceptemos sin protestar las arbitrariedades de esta empresa, aunque para esto tengan que utilizar el más burdo de los engaños.

Desde hace tiempo este sindicato viene jugado un papel protagonista en la dilapidación paulatina de los derechos de los trabajadores en general y de banca en particular.

Sabemos que la memoría es débil, que olvidamos rapidamente, pero cuestiones como estas, firmar acuerdos perjudiciales para gran parte de la plantilla de un centro de trabajo, desoyendo las protestas de los empleados, no es la primera vez que lo hacen, deben permanecer en el tiempo, debe permanecer en nuestra memoria. Debemos tener actuaciones como esta muy en cuenta a la hora de votar en las elecciones sindicales. Debemos ser muy conscientes de a quien damos nuestro voto, pues luego, con nuestros votos firman acuerdos que empeoran nuestras condiciones de trabajo.


Fuente: Sección sindical de CGT en Banco de Santander