La sección sindical de CGT en la depuradora de la China (Madrid) valora positivamente la iniciativa del PSOE de soterrar la depuradora en vez de desmantelarla con un coste de 900 millones, 150.000.000.000 pts como pretendía el alcaldísimo Gallardón, el alcalde faraón de la dinastía de las tuneladoras, que o bien da la orden de despedir al delegado sindical de CGT, nuestro hombre en la China, o bien lo consiente tras denunciar éste el vertido de 90.000 litros de agua contaminada proveniente del reactor nuclear del CIEMAT.
Al mismo tiempo esta sección sindical continuará exigiendo un estudio radiológico en las instalaciones por las que pasó el vertido del accidente del 70, la mayor catástrofe radiactiva en Europa antes de Chernobil. Un vertido 4.000.000 millones de veces por encima de lo que marca SU ley recorrió el alcantarillado desde el CIEMAT (antigua JEN) y contaminó hasta Lisboa. Nunca se descontaminó la depuradora y desde el año 2004 hay un trabajador con incapacidad total por una enfermedad degenerativa que puede ser debida a radiaciones ionizantes, según informe medico.
De ningún modo vamos a consentir que se construya un sarcófago de hormigón y plomo y se nos mantenga dentro, por lo tanto CGT en la China, continuará su batalla por un medidor de radiactividad, ya que son cientos de miles de litros lo que se han vertido desde 1951 y la radiactividad es eterna.
Con el agua de la depuradora se riegan los parques de la capital y se baldean sus calles, el resto continua río abajo y riega los alimentos que se consumen en la capital.
En el fango de la depuradora hay cesio 137, un isótopo radioactivo proveniente del CIEMAT, y en el agua de salida, iodo 131, un isótopo radioactivo de uso hospitalario. Estos venenos en el agua y más no sólo los reciben los trabajadores de las depuradoras : el cáncer de colon en Madrid aumentó el año pasado un 22% según noticias aparecidas en la prensa.
Acometer cualquier tipo de obras, bien sea desmantelamiento o soterramiento, sin un estudio y una descontaminación si fuese necesario podría poner en peligro la salud de los vecinos de Villaverde y San Fermín al remover tierras donde existe la sospecha fundada de que puedan estar contaminadas.
Fuente: Redacción.
