La campaña iniciada por CGT en Ford para denunciar la política represiva y discriminatoria que se ejerce dentro de la fábrica, continúa en su segunda semana con buena acogida por parte de la plantilla. Durante estos días se están explicando en todos los comedores y mediante hojas informativas la causa y los objetivos de la campaña contra las sanciones. Por los delegados sindicales se está señalando que en el período de enero de 2006 a noviembre de 2007 se han aplicado por la dirección de Ford el triple de expedientes sancionadores que en el comprendido entre enero de 2002 y diciembre de 2005.
Al mismo tiempo se está informando de la edición y venta de unos Bonos Solidarios (de cinco euros) que se han empezado a distribuir a los trabajadores, y con cuya adquisición éstos apoyan económicamente a un delegado del Comité de Empresa que ha sido sancionado sucesivamente con sendas suspensiones de empleo y sueldo de dos meses cada una. La iniciativa ha superado las mejores previsiones, y en los dos primeros días de la venta de los citados bonos han sido varios centenares los trabajadores los que ya han efectuado su colaboración solidaria. La CGT se ha comprometido a devolver el importe de todos los bonos si se ganan los juicios contra Ford y la empresa es obligada a pagar al delegado sancionado los sueldos descontados en esos cuatro meses.
En la próxima semana la campaña va a continuar con una concentración de denuncia de las políticas represivas de Ford, ante la puerta principal de la fábrica de Almussafes. A esta concentración se espera que acudan delegados de CGT de otras empresas y contratas del polígono industrial Juan Carlos, así como delegados y trabajadores de la propia Ford.
Fuente: Gabinete de Prensa de CGT-PV