Enmarcado dentro del día de lucha nacional e internacional que han convocado organizaciones, colectivos e individuos pertenecientes a La Otra Campaña Mexicana, el sábado 30 de mayo, la CGT salió a la calle para exigir la libertad de los pres@s polític@s mexican@s.
Varias fueron las localidades en las que se realizaron acciones de protesta. Como la concentración realizada en la céntrica calle Mercaderes de Iruña, el acto informativo de Sevilla, las concentraciones frente al consulado de México en Alicante, en la plaza de Santo Domingo en Murcia. Las compañeras y compañeros de CGT en Valladolid aprovecharon la décima edición del Festival de Teatro y Artes de calle en dicha localidad para realizar un pasacalles…..al final consiguieron que las estatuas exigieran la libertad de l@s pres@s polític@s mexican@s.
En otras ciudades las acciones se realizaron conjuntamente con otros colectivos como en Madrid donde se efectuó una protesta frente a la embajada mexicana, convocada también por la Plataforma de Solidaridad con Chiapas, el Centro de Documentación sobre Zapatismo y el Grupo IRU o junto con el colectivo El Caracol frente al Consulado de México en Valencia. En Zaragoza la CGT y el Caracol de Zaragoza leyeron un manifiesto en el concierto contra la tortura que tuvo lugar en el Centro Cívico del Tío Jorge.
Mediante concentraciones, reparto de octavillas informativas, lecturas de manifiestos y acciones lúdico-reivindicativas la CGT salió a la calle para mostrar a la opinión pública su rechazo ante la situación de represión que están sufriendo en México un número muy elevado de luchadores y luchadoras sociales. Para rechazar y denunciar la complicidad de los tres niveles de gobierno y de los tres partidos (PAN, PRI y PRD) y para exigir la libertad de l@s pres@s y desaparecid@s polític@s, así como el cese de las hostilidades a las comunidades zapatistas y la libertad de los 7 compañeros detenidos adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona del municipio de Bachajón.
Fuente: José Pascual Rubio.
Secr. de RRII de la CGT