Un total de 14 trabajadoras de la planta de Vilaxoán ya han aceptado el traslado a cambio de un puesto fijo en Ribadumia. Sin embargo, siete empleadas han decidido no aceptar el cambio y, según apunta, la CGT no están siendo llamadas a trabajar en el centro vilaxoanés. En este sentido, el sindicato liderado po Miguel Cuña, reclama que las trabajadoras que no han aceptado el cambio propuesto por la empresa pasen de ser fijas discontinuas a fijas basándose en la próxima ampliación de la plantilla con la llegada de los empleadas de Vigo . “Lo que no vamos a tolerar es que la negociación de la empresa con las trabajadoras viguesas pueda afectar a las de Vilaxoán”, señala Cuña.

Un total de 14 trabajadoras de la planta de Vilaxoán ya han aceptado el traslado a cambio de un puesto fijo en Ribadumia. Sin embargo, siete empleadas han decidido no aceptar el cambio y, según apunta, la CGT no están siendo llamadas a trabajar en el centro vilaxoanés. En este sentido, el sindicato liderado po Miguel Cuña, reclama que las trabajadoras que no han aceptado el cambio propuesto por la empresa pasen de ser fijas discontinuas a fijas basándose en la próxima ampliación de la plantilla con la llegada de los empleadas de Vigo . “Lo que no vamos a tolerar es que la negociación de la empresa con las trabajadoras viguesas pueda afectar a las de Vilaxoán”, señala Cuña.

En los próximos días tal y como les ha sido requerido por Inspección de Trabajo, la directiva de Alfageme tendrá que responder a las preguntas formuladas por escrito y durante la reunión de ayer en materia laboral.

Respecto al traslado de Vigo, la CGT asegura que les consta el nerviosismo por parte de la plantilla debido a la falta de información de la empresa.

Por su parte, el secretario comarcal de CCOO, Fernando Ramos, también insistía hace unos días en la necesidad de que se produjese un encuentro entre la patronal y los sindicatos y aseguraba que la “cohartada de las elecciones gallegas ya había caducado”.

Ramos que restaba importancia a la parada técnica de la planta de O Grove, “algo que se produce todos los años”, subrayaba, sin embargo, la preocupación ante la posibilidad de que la empresa volviese a tener problemas de liquidez.

Precisamente en el mes de febrero la directiva de Bernardo Alfageme recurría al aval del Igape para poder obtener liquidez con la que poder pagar a sus proveedores. La situación provocó a los pocos días un encuentro con los comités de empresa para dar explicaciones de lo ocurrido y para enviar un mensaje de tranquilidad a sus empleados.


Fuente: L.F. > www.diariodearousa.com