Griselda Lobo (Senadora) y Jairo Quintero (Diputado) han venido a la sede del Secretariado Permanente de la CGT confederal, acompañados por dos representantes de IU, para explicarnos cómo se está llevando a cabo el acuerdo del proceso de paz para Colombia, firmado en La Habana por las FARC y el Presidente Santos (expresidente en la actualidad).

Nos explican que los incumplimientos de un acuerdo tan necesario y sensible para la sociedad colombiana, los asesinatos continuos y permanentes de las personas activistas sociales, sindicalistas y exguerrilleros implicados vitalmente en el proceso de paz, están pasando inadvertidos para el resto del mundo y, por ello, están haciendo una gira por varios países europeos para informar sobre ello.

Nos explican que los incumplimientos de un acuerdo tan necesario y sensible para la sociedad colombiana, los asesinatos continuos y permanentes de las personas activistas sociales, sindicalistas y exguerrilleros implicados vitalmente en el proceso de paz, están pasando inadvertidos para el resto del mundo y, por ello, están haciendo una gira por varios países europeos para informar sobre ello.

Denuncian, entre muchas otras cosas, que hay 540 sindicalistas asesinados desde la firma del acuerdo, que no se ha puesto en marcha el cuerpo especial de policía para la lucha contra los paramilitares, tal como figura en el Acuerdo de Paz, ni se desarrolla suficientemente el meollo que dio lugar al conflicto armado y supone la centralidad del acuerdo, es decir, la Reforma Agraria para otorgar tierras a los campesinos colombianos. En el Acuerdo de Paz se establecía que se haría un catastro de propietarios de tierras para crear un fondo de tierras de cara a repartir entre el campesinado que no se está haciendo. Hay 12 millones de campesinos en Colombia y el 1% es propietario del 97% de la tierra.

En definitiva vienen a pedir que se deje de agredir a los campesinos y que se respeten los Derechos Humanos en Colombia, para hacer posible el desarrollo del Acuerdo de Paz, tan necesario para la vida de la sociedad colombiana, pero que están impidiendo quienes están vinculados a la economía paralela del narcotráfico y los paramilitares.


Fuente: Secretariado Permanente del Comité Confederal de la CGT