Texto en castellano y francés
La Confederación General del Trabajo, ante el crimen que ha costado la vida de más de 60 trabajadores y trabajadoras (todavía no hay una cifra exacta de muertos) en la fábrica Rosamor Mobiliario de Casablanca (Marruecos), quiere expresar en primer lugar su dolor y profunda tristeza por lo sucedido y enviar un fuerte abrazo a los familiares y amigos de las víctimas.
Texto en castellano y francés

La Confederación General del Trabajo, ante el crimen que ha costado la
vida de más de 60 trabajadores y trabajadoras (todavía no hay una cifra
exacta de muertos) en la fábrica Rosamor Mobiliario de Casablanca
(Marruecos), quiere expresar en primer lugar su dolor y profunda
tristeza por lo sucedido y enviar un fuerte abrazo a los familiares y
amigos de las víctimas.

Pero también queremos expresar nuestra rabia e indignación por lo que
consideramos *un acto más de terrorismo empresarial*. Este accidente
laboral ha puesto de manifiesto las condiciones laborales en las que se
encontraban trabajando los y las trabajadoras de Rosamor Mobiliario :

  •  Una única puerta cerrada, sin salidas de emergencia, para evitar
    que se pudiera sacar nada de la fábrica.

  •  Productos tóxicos y altamente inflamables que, día a día, van
    envenenando a las trabajadoras y trabajadores y que, ante un
    cortocircuito convirtieron la fábrica en una trampa mortal.

  •  Extintores vacíos, ventanas con rejas, maquinaria sin un
    mantenimiento serio y medidas de seguridad inexistentes

  •  Trabajadores y trabajadoras sin estar dados de alta en la
    seguridad social (más del 90 % de la plantilla, solamente 30 de
    400 trabajadores), con salarios entre 20 y 30 euros semanales.

  •  En las tres horas que duró el incendio, los principales esfuerzos
    se dedicaron a salvar la producción, mientras, refugiados en los
    pisos superiores, las trabajadoras y trabajadores se asfixiaban
    por el humo sin encontrar salida.

    La CGT denuncia la hipocresía del gobierno marroquí, del que nadie
    dimite ni se hace responsable, queriendo centrar la responsabilidad sólo
    en el empresario y no también en los que permiten que se den estas
    condiciones de trabajo. Lo ocurrido en Casablanca no es un hecho
    aislado, dos días después otro incendio en la misma ciudad ha causado
    tres muertos más. La CGT ha constatado directamente en otros centros de
    trabajo de Marruecos (minas de Jbel Awan en Mrirt, en una fábrica de
    zapatos de Ksar-el-Kebir, en Delphi-Tanger) el desprecio por la vida y
    la salud de los trabajadores y trabajadoras, ya que la ausencia de
    medidas de seguridad es una norma generalizada.

    Para la CGT, lo ocurrido en Casablanca es la expresión extrema de un
    sistema. Un sistema capitalista compartido por los gobiernos de
    Marruecos y España, que coloca el beneficio empresarial, el crecimiento
    económico, la productividad, el libre comercio y la competencia por
    encima de la vida y de las personas, considerando y tratando a los
    trabajadores y trabajadoras como una mercancía que se compra y se vende.

    En el 2007, 844 trabajadores y trabajadoras perdieron la vida en el
    estado Español. Hace tres días, otras 60 fallecieron en Casablanca.
    Este 1º de mayo debe recordarnos a todas y todos que nuestros compañeros
    y compañeras de Casablanca han muerto por la avaricia de la patronal y
    debemos ser conscientes de la necesidad de luchar contra un sistema
    basado en la explotación de la mayoría de la población.


    La Confédération Générale du Travail, devant le crime qui a coûté la vie
    de plus de 60 travailleurs et travailleuses (encore il n’y a pas un
    chiffre précis de morts) dans l’usine Rosamor Mobilier de Casablanca
    (Maroc), veut exprimer d’abord sa douleur et tristesse profonde et
    envoyer une forte embrassade aux familiers et amis/ies des victimes.

    Mais nous voulons aussi exprimer notre rage et indignation parce que nous
    considérons * un acte plus de terrorisme patronal *. Cet accident du
    travail a mis en évidence les conditions de travail dans lesquelles se
    trouvaient les travailleurs/euses de Rosamor Mobilier :

     Une seule porte fermée, sans issue d’urgence, pour éviter qu’on
    puisse sortir rien de l’usine.
     Produits toxiques et hautement inflammables qui, jour après jour,
    empoisonnent aux travailleurs et aux travailleuses et qui, par un
    court-circuit, ont transformé l’usine dans un piège mortel.
     Extincteurs vides, fenêtres avec des grilles, machines sans un
    maintien sérieux et mesures de sécurité inexistantes
     Travailleurs et travailleuses sans être inscrits dans la CNSS
    (plus de 90% du personnel), avec des salaires entre 20 et 30 euros par
    semaine
     Dans les trois heures qui a duré l’incendie, les principaux
    efforts ont été consacrés à sauver la production, pendant que, abrités
    dans les étages supérieurs, les travailleurs et les travailleuses étaient
    asphyxiés par la fumée sans trouver sortie.

    La CGT dénonce l’hypocrisie du gouvernement marocain, dont personne
    démissionne ni se fait responsable, en voulant centrer la responsabilité
    seulement au patron et oublier la responsabilité de ceux qui permettent
    l´existence de ces conditions du travail. Ce qui s’est produit à
    Casablanca, ce n’est pas un fait isolé, deux jours ensuite un autre
    incendie dans la même ville a causé trois morts plus. La CGT a directement
    constaté dans d’autres centres de travail du Maroc (mines de Jbel Awan en
    Mrirt, dans une usine de chaussures de Ksar-el-Kebir, en Delphi- Tanger)
    le dédain par la vie et la santé des travailleurs et travailleuses,
    puisque l’absence de mesures de sécurité est une norme généralisée.

    Pour la CGT, ce qui s’est produit à Casablanca est l’expression extrême
    d’un système. Un système capitaliste partagé par les gouvernements du
    Maroc et de l’Espagne, qui place le bénéfice patronal, la croissance
    économique, la productivité, le libre commerce et la concurrence au-dessus
    de la vie et des personnes, qui considére les travailleurs et
    travailleuses comme une marchandise pour acheter et vendre À 2007,.844
    travailleurs et travailleuses ont perdu la vie dans l’état espagnol. Il y
    a trois jours, autres 60 sont décédées à Casablanca.

    Le 1º de mai doit nous rappeler à toutes et tous que nos frères et soeurs
    de Casablanca sont morts par l’avarice de la patronale et nous devons
    être conscients de la nécessité de combattre contre un système basé à
    l’exploitation de la majorité de la population

    . CONFÉDÉRATION GÉNÉRALE DU TRAVAIL. (état espagnol)


    Fuente: Confederación General del Trabajo