La Comisión Europea pedirá información al Gobierno para determinar si es cierta la denuncia que hizo el eurodiputado de IU Willy Meyer en una pregunta parlamentaria en relación a la contaminación radioactiva que estarían generando las obras de la M-30. En caso de verificar estas afirmaciones, exigirá a las autoridades españolas que establezcan medidas para garantizar la seguridad de los trabajadores y del público general.

La Comisión Europea pedirá información al Gobierno para determinar si es cierta la denuncia que hizo el eurodiputado de IU Willy Meyer en una pregunta parlamentaria en relación a la contaminación radioactiva que estarían generando las obras de la M-30. En caso de verificar estas afirmaciones, exigirá a las autoridades españolas que establezcan medidas para garantizar la seguridad de los trabajadores y del público general.

En su respuesta a la pregunta de Meyer, el comisario de Energía, Andris Piebalgs, admitió que la Comisión ’no está en posesión de la información independiente’ necesaria para dar por bueno el hecho de que las obras de la M-30 están provocando fugas de los desechos radioactivos que origina el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), ubicada dentro de Madrid, a su paso por la margen izquierda del río Manzanares.

A pesar de ello, Piebalgs afirmó que ’la Comisión pedirá información relevante a las autoridades españolas para decidir si la legislación europea sobre protección frente a la radiación se está cumpliendo en este caso’.

Posteriormente, añadió, ’la Comisión decidirá si tienen que tomarse medidas’ para cumplir las reglas comunitarias, algo que recordó que correspondería al Gobierno.

En su pregunta, el eurodiputado de IU explicó que el alcantarillado que canaliza los desechos del CIEMAT ’corre paralelo a la margen izquierda del Manzanares, cruzando la capital de norte a sur y después, tras atravesar la planta de purificación de ’La China’, la basura llega al Manzanares y después al Jarama y el Tajo’.

Recordó que ya en 2003 un informe del CIEMAT reveló ’la presencia significativa de contaminación radioactiva en parte de la red de aguas residuales’ a lo largo de este recorrido y aseveró que ’en el presente, no hay duda de que el movimiento de tierra en el diseño de la M-30 podría afectar a parte de la red de aguas contaminada’.

En este sentido, Meyer apunta a dos reglamentos de la UE que, en su opinión, no se estarían cumpliendo, el relativo a los efectos sobre el medio ambiente de ciertos proyectos públicos o privados y el que alude a las medidas de protección de la salud de trabajadores y público en general frente a la radiación’.


Fuente: Europa Press