Pues nada. Que para salir de esta crisis, nos dicen “nuestros” sesudos dirigentes, debemos hacer absolutamente lo mismo que lo que nos ha llevado a la coyuntura actual : producir y consumir desaforadamente. Y claro, para poder consumir, necesitamos trabajar, o más bien, lo que necesitamos es dinero ; y como no es un momento sencillo para encontrar trabajo- ni dinero- nos asimos con fuerza al propio, tragando carros y carretas, no vaya a ser que tengamos problemas y nos echen… Que hay que meter horas extras, se meten ; que hay que aceptar condiciones laborales, que en muchos casos nos retrotraen a principios del siglo XX, se aceptan ; pero claro, es que las letras no se pagan solas, ni las guarderías, ni las facturas,…
Y así nos vamos hundiendo más y más, en este lodazal que constituye el sistema capitalista. Cuanto más trabajas, más se requiere que lo hagas, ya que los productos que debes consumir para que la economía siga creciendo, son cada vez más y más, al igual que tus “necesidades” (cómo vas a vivir sin GPS, sin iPods, sin móvil, sin esas zapatillas o gafas de sol panorámicas que “todo el mundo lleva” ; sin vinos de 2,50€ la copa, sin ir a Londres, Barcelona o Madrid de compras utilizando vuelos baratos o trenes “caros” ; cómo vivir sin acudir a macro festivales, macro modernos, macro patrocinados y macro capitalistas). Planes Prever, cheques descuento, alta velocidad… ¡¡comprad, comprad, comprad !! ¡¡trabajad, trabajad, trabajad !! Somos auténticos esclavos de este sistema, en el que se nos exprime, con una aceptación y sumisión tan interiorizadas por muchas personas, que no nos debe extrañar que ante tanto E.R.E., tanta deslocalización, tanto abuso patronal, tanto despilfarro de recursos naturales, tanta ayudita a la banca,… la solución para muchos sea : “agarra el dinero y corre”. Y te puede solucionar unos meses, pero ¿hacia donde vas a correr ?
La solución no pasa por mejorar este sistema, que por otra parte resultaría imposible por su radical apuesta por la injusticia social y el individualismo, sino por acabar con él. Por darnos cuenta, de una vez por todas, que por mucho que trabajemos, siempre vamos a estar en crisis y con necesidad de trabajar más y más ; que para el actual modelo económico-social, debemos cumplir la dualidad trabajador-consumidor, y esa dualidad nos encadena de tal forma que nos está ahogando irremediablemente.
Por todo esto, y otras muchísimas causas que requerirían de un Tratado más que de un simple artículo de opinión, se ve no sólo necesario, sino que resulta imprescindible, empezar a reaccionar. Y una oportunidad de comenzar un cambio, se nos presenta el próximo 21 de mayo, con una huelga general convocada en Euskal Herria, que debe servirnos para comenzar a organizarnos como clase afectada, como clase en crisis, como clase trabajadora. Sólo organizándonos, y esta huelga puede ser una buena herramienta para ello, podremos defender la Justicia Social y evitar que nos sigan tomando por incompetentes, cuando no por simplemente tontos.
El 21 de mayo, todos a la calle !!
Juan Mari Arazuri (militante CGT-LKN)
Fuente: Juan Mari Arazuri (militante CGT-LKN)