Artículo de opinión de Maura Rodrigo, secretaria general CGT-LKN Nafarroa

 

Saludamos el reconocimiento y homenaje a la figura de José María Jimeno Jurio; persona comprometida con la historia y con la verdad, que a través de sus rigurosos trabajos ilumina el relato de las personas desposeídas, humilladas, escarnecidas, completando el relato histórico que la parte oficial, la vencedora de cada época, se encarga de ocultar ó ensombrecer.

 

Saludamos el reconocimiento y homenaje a la figura de José María Jimeno Jurio; persona comprometida con la historia y con la verdad, que a través de sus rigurosos trabajos ilumina el relato de las personas desposeídas, humilladas, escarnecidas, completando el relato histórico que la parte oficial, la vencedora de cada época, se encarga de ocultar ó ensombrecer.

Jimeno Jurio, en su búsqueda de la verdad de los hechos acaecidos en esta tierra a lo largo de siglos se sitúa en el ámbito del rigor y de la recuperación del legado cultural. Pero de manera importante su investigación le conforma como pionero de la recuperación de la memoria histórica en el ámbito estatal y sus conclusiones le confieren el status de persona non grata para el régimen; no así para todos los agraviados, personas y hechos, en la historia, puestos en valor gracias a su avidez por el conocimiento.

Su empeño en esta materia, la de la memoria, iniciado en 1977, lleva a descubrir y conformar más de dos mil quinientas fichas de ejecuciones sumarísimas, certificando la gravedad de unos hechos jamás reparados y que aquella sociedad del miedo llevó en sus entrañas hasta bien entrada la transición. Una sociedad, la de hoy, heredera de aquella, que no es capaz de alcanzar acuerdos en esta materia avanzando con ritmo cansino en la humanización de la memoria.

Hoy, la designación de su persona para la más alta condecoración, viene a remediar la insidia no solo hacia la honesta figura del artajonés y su trabajo, sino además al valor real del desagravio de la propia memoria histórica.

Maura Rodrigo

 

 

 


Fuente: Maura Rodrigo