Es habitual que los entes orgánicos abran cuentas de solidaridad por algún conflicto, pero también va siendo demasiado normal que los solidarios no sepan qué destino se ha dado a la solidaridad recibida por dichos entes.
Porque no se pierdan las buenas costumbres
Es habitual que los entes orgánicos abran cuentas de solidaridad por algún conflicto, pero también va siendo demasiado normal que los solidarios no sepan qué destino se ha dado a la solidaridad recibida por dichos entes.
Por eso, considero que, cuando se hace un llamamiento a la solidaridad económica se debe especificar si el dinero que se piensa recaudar es para la campaña de que se trate o si es para el compañero directamente (o para ambos). En caso de que sea para el compañero, se debe aclarar muy bien cuál es la situación económica que provoca la necesidad y debe estar claro también que si el compañero recupera el dinero (a través de sentencia o del paro, por ejemplo), deberá devolverlo, ya que tenemos muchas necesidades y muchos compañeros a los que socorrer.
También debería ser habitual el que los entes que administran estas cuentas informen de los movimientos de las mismas : en definitiva, quién aporta (sean otros entes, compañeros o aportaciones anónimas) y en qué se gasta el dinero y, como no, qué se hace con el dinero que pueda sobrar al final.
En fin, creo que sería necesario que todos lo hiciésemos así. Seguramente se producirían menos dudas en algunos compañeros y los solidarios podríamos valorar como distribuir mejor los dineros de los que podamos disponer para el apoyo mutuo. Salud
Jose. Afiliado a la CGT de La Coruña.
Par : SOV A Coruña
Fuente: Jose. Afiliado a la CGT de La Coruña.