Carta abierta a Alfonso Grau.
Soy un trabajador de la Empresa Municipal de Transportes, delegado en el Comité de Empresa por la Confederación General del Trabajo y llevo en la empresa 25 años. Como militante de CGT y delegado veterano he tenido oportunidad de tratar con gobiernos municipales de distinto color, con diferentes Presidentes del Consejo de Administración y de negociar junto a mis compañeros convenios con mayor o menor fortuna.
Considero inmoral que amenace usted a la plantilla de trabajadores de
EMT con un ERE si no renunciamos a nuestro salario y condiciones
laborales. Considero una manipulación intolerable que haya aprovechado
su equipo de gobierno la actual coyuntura socioeconómica para reventar
una empresa como EMT. Considero una irresponsabilidad manifiesta
mantener en vilo a 1.600 familias a base de propagar miedo y amenazas.
Considero una vileza que criminalice al colectivo de EMT como si fuese
el culpable de la situación económica del ayuntamiento.
Considero inmoral que amenace usted a la plantilla de trabajadores de
EMT con un ERE si no renunciamos a nuestro salario y condiciones
laborales. Considero una manipulación intolerable que haya aprovechado
su equipo de gobierno la actual coyuntura socioeconómica para reventar
una empresa como EMT. Considero una irresponsabilidad manifiesta
mantener en vilo a 1.600 familias a base de propagar miedo y amenazas.
Considero una vileza que criminalice al colectivo de EMT como si fuese
el culpable de la situación económica del ayuntamiento.
En una empresa donde anualmente se están haciendo una ingente
cantidad de horas extras, donde las subcontratas y externalizaciones son
el pan nuestro de cada día, y las ETT campan a sus anchas, no se puede
hablar de ERES. Es inmoral.
Tampoco se pueden cambiar unos presupuestos de la noche a la mañana
aprovechando la Reforma Laboral para acabar con el equilibrio económico y
laboral de 1.600 familias. Ustedes aprobaron unos presupuestos 2012 en
noviembre un 10% inferiores al año 2011, unos 6 millones de euros
aproximadamente inferiores al ejercicio anterior. Eso suponía que los
trabajadores de EMT íbamos a seguir haciendo un esfuerzo en cuanto a
contención salarial y productividad.
Y en vísperas de una reforma laboral que solo va a servir para
abaratar los costes laborales, el despido y precarizar las condiciones
laborales, nunca para crear empleo, el Jefe de Recursos Humanos presenta
al Comité de Empresa una rebaja del presupuesto de 10 millones. Y
exclusivamente a costa del bolsillo de los trabajadores.
Los trabajadores de EMT cumplimos con nuestro trabajo. Es usted libre
de considerar que estamos sobrevalorados y de que nuestro convenio es
superior a otros. A nosotros nos gustaría saber qué sindicato negocia el
suyo.
Se han jactado de que el Ayuntamiento de Valencia está excelentemente
gestionado. La deuda a proveedores asciende a 181 millones. Unos 225
euros por ciudadano. ¿Entonces por qué ese empeño en que los
trabajadores de EMT aporten más de 6.000 euros por cabeza al déficit del
ayuntamiento? En los presupuestos Municipales prevén un aumento de
ingresos del 3´2%. Unos 22 millones de euros. Se han dejado perder unos
200 millones en subvenciones al transporte del Contrato-Programa al que
se han acogido otras ciudades como Madrid y Barcelona. ¿Por qué ese
ataque directo a los trabajadores de EMT?
Me da que pensar, y mal. Tengo que creer que quieren reventar las
condiciones económicas, sociales y laborales de 1.600 familias por
oscuros intereses. El tiempo lo dirá.
Los trabajadores de EMT somos conscientes de la realidad del país.
Cómo no. Los más jóvenes porque se las ven negras para pagar cada mes la
inflada hipoteca que propició la burbuja inmobiliaria y mantener la
familia. Y los más mayores porque vemos la desesperanza de nuestros
hijos a los que seguimos manteniendo en casa. ¿O acaso piensa que
vivimos una realidad diferente?
Los trabajadores de EMT no somos los culpables del derroche, la corrupción, la mala gestión y la crisis financiera.
Camps pagó a Calatrava 15 millones de euros por un proyecto fantasma.
Y no fue imputado porque el derroche no está tipificado como delito.
Eso es vivir una realidad diferente.
Usted, como Vicealcalde de Valencia, Concejal Delegado de Turismo y
presidente del Patronato Turismo Convention Bureau pagó a Urdangarín dos
millones de euros por la Valencia SUMMI. Era la Casa Real.
No tiene usted ningún derecho a pedir a este colectivo el sobreesfuerzo tan desproporcionado que le exige.
Gregorio Rabadán Sampedro
CGT-EMT
(Artículo, reducido, publicado hoy en la edición impresa de
Levante-EMV después de la noticia «Los once directivos más altos de la
EMT cobran 970.000 euros al año»)
En http://www.cgtpv.org/Gregorio-Rabadan-CGT-EMT-La.html
Fuente: CGT-EMT Valencia