Greenpeace advierte que el transporte marítimo de petróleo ha aumentado un 12% desde la catástrofe del Prestige
La organización ecologista Greenpeace criticó hoy que casi tres años después del Prestige sigue sin existir un régimen de responsabilidad ilimitada que obligue a asumir las consecuencias de un vertido a sus responsables.
Greenpeace advierte que el transporte marítimo de petróleo ha aumentado un 12% desde la catástrofe del Prestige

La organización ecologista Greenpeace criticó hoy que casi tres años después del Prestige sigue sin existir un régimen de responsabilidad ilimitada que obligue a asumir las consecuencias de un vertido a sus responsables.

Con motivo del Día Marítimo Internacional que se celebra mañana en todo el mundo, Greenpeace advierte de que en los últimos dos años se ha producido un aumento del 12% en la cantidad de productos petrolíferos que se transportan por mar, sin que se haya creado un régimen de responsabilidad que obligue a los que se benefician del tráfico de petróleo a hacer frente a todas las consecuencias económicas de un vertido.

Según datos de la Organización Marítima Internacional (OMI), el transporte global de petróleo ha aumentado de 2.000 millones de toneladas en el año 2002 (año en que ocurrió la catástrofe del Prestige) hasta los 2.280 millones de toneladas en 2004.

Greenpeace advierte de que aunque se han producido algunos avances en la legislación europea, todavía existen graves lagunas legales en el tráfico marítimo de petróleo, especialmente en lo relativo a la responsabilidad derivada de accidentes como el caso Prestige.

Este colectivo valora que la Unión Europea (UE) haya establecido un calendario de eliminación de buques monocasco, cuya presencia está ya prohibida en los puertos europeos.

Sin embargo Greenpeace denuncia la inexistencia de un seguimiento adecuado por parte de la UE de los buques que deben desaparecer, y de las instalaciones para eliminarlos. Actualmente no existen instalaciones adecuadas de desmantelamiento de buques en Europa, y se llevan a países no miembros de la OCDE, donde son desguazados en instalaciones inadecuadas.

Los materiales procedentes del desmantelamiento de petroleros que mayor daño pueden causar al medio ambiente son los residuos petrolíferos, PCBs, aceites, amianto y restos con metales pesados. Actualmente estos residuos acaban vertidos en el medio ambiente en una cantidad de entre 500.000 y 1,5 m de toneladas cada año.

Greenpeace hace un llamamiento a la creación de un nuevo régimen de responsabilidad en materia de transporte marítimo, que se extienda a toda la cadena de transporte. Greenpeace demanda que ese nuevo régimen sea de responsabilidad ilimitada.

«Casi tres años después de la catástrofe del Prestige no ha cambiado uno de los elementos fundamentales que pueden evitar nuevas mareas negras : el régimen de responsabilidad. Todavía hoy los que se benefician del tráfico de petróleo no tienen que hacer frente a sus responsabilidades en caso de accidente», señaló el director de Greenpeace, Juan López de Uralde.


Fuente: EUROPA PRESS