La empresa Gestalex, que ejecutaba unas obras en La Zubia en la que el pasado abril falleció un obrero, se ha declarado insolvente y no ha pagado a sus trabajadores en julio, por lo que éstos se concentraron hoy ante la promotora principal, Arcón Patrimonial, para reclamar sus salarios.

La empresa Gestalex, que ejecutaba unas obras en La Zubia en la que el pasado abril falleció un obrero, se ha declarado insolvente y no ha pagado a sus trabajadores en julio, por lo que éstos se concentraron hoy ante la promotora principal, Arcón Patrimonial, para reclamar sus salarios.

Uno de los empleados, Jesús Gallardo, informó hoy que, además del sueldo de este mes, reclaman el finiquito por el despido, por lo que se congregarán «todas las mañanas» ante la sede de la promotora hasta que se salde la deuda.
Por su parte, el secretario provincial de Construcción de CCOO, Francisco Quirós, exigió a la empresa promotora el pago del salario de julio a los obreros «al ser la principal subsidiaria», y añadió que demandarán a Gestalex por despido improcedente y a Arcón por «no pagar el salario e incumplir las medidas de seguridad laboral».
Uno de los socios de Arcón Patrimonial, Raúl Ollés, indicó que cuando un juez declare insolvente a Gestalex y dictamine que su empresa es la subsidiaria «se habrá cumplido el procedimiento legal y Arcón se hará cargo de los salarios de los trabajadores», aunque, subrayó, hasta que llegue ese momento consideran que no tienen que pagar nada.
Respecto a la acusación de los sindicatos y los trabajadores de que Arcón incumple las normativas de seguridad laboral, Ollés aclaró que estas responsabilidades «corresponden directamente a la empresa constructora, en este caso, Gestalex, a la que siempre se le ha exigido que tenga el plan de seguridad al día, y las medidas cubiertas junto con los seguros de responsabilidad civil».
El abogado de Arcón Patrimonial, Francisco Reyes, recordó el accidente del obrero fallecido de Gestalex mientras trabajaba el pasado abril, y aseguró que «hay una resolución laboral por parte de la Inspección de Trabajo que dice que la persona fallecida en la obra no era un trabajador y no estaba contratado por nadie, por lo que no existía relación laboral entre el obrero y Arcón».


Fuente: EFE