El Tribunal Superior de Justicia de Castilla la Mancha ha declarado nulo el despido de un afiliado a la CGT y ha condenado a la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla la Mancha (Geacam) a readmitir al compañero y a abonarle los salarios de tramitación.
La empresa reconoció la improcedencia del despido del trabajador en el acto de conciliación. La nulidad se produce porque no se dio al trabajador temporal el mismo trato que se da a los trabajadores fijos discontinuos. En este caso, la oportunidad de pasar una segunda prueba de aptitud física transcurridos al menos 20 días del primer examen, en este tiempo podría haber solucionado su falta de aptitud ya que se trataba de una cuestión fácilmente subsanable. Además el convenio señala que en el supuesto de no superar el segundo examen médico el trabajador no podrá incorporarse a su puesto durante el periodo de extinción de incendios, debiendo la empresa ofertarle otros puestos vacantes para los que no se requiera la mencionada aptitud.
La nulidad llega en plena negociación del convenio colectivo cuando las reivindicaciones más básicas están en la palestra y el peligro de retroceso en las condiciones laborales es inminente tras la subrogación de los trabajadores de Tragsa.
La empresa incumple reiteradamente el convenio de prevención y extinción de incendios con la excusa de no haberlo firmado ya que la creación de esta empresa pública es posterior a la firma del mismo. Ha abandonado además las negociaciones del convenio colectivo que se están produciendo.
Los trabajadores de CGT se encuentran con gran frecuencia como respuesta a sus peticiones la recomendación de acudir a los tribunales. Cuando por fin se van resolviendo las demandas dan la razón a los compañeros.
Hay convocadas movilizaciones ante las sedes provinciales de Geacam los días 15 y 16 de julio.
STAP CGT Madrid-Castilla La Mancha
Fuente: STAP CGT Madrid
