Hagamos oír nuestra voz. Las personas y entidades que formamos Tanquem les Nuclears hacemos un llamamiento a la resistencia para que no renueven el permiso de explotación de una nuclear vieja, peligrosa e innecesaria. Queremos que desde el tejido asociativo de base, tanto de Cataluña como de fuera de Cataluña, se desautorice a quienes juegan irresponsablemente con nuestra salud y el medio ambiente.

Os animamos a que desde cada asociación, cooperativa, grupo cultural, deportivo o juvenil, fundación, empresa o comercio; desde cada sección o desde cada local sindical, desde cada agrupación local o sectorial de cada fuerza política, desde ayuntamientos y consejos comarcales, o desde el mundo de la enseñanza ?, vayáis a la web http://www.tanquemlesnuclears.org/ y apoyéis el texto básico que denuncia esta decisión irracional, y que os reproducimos a continuación.

DEMANDA:

Os animamos a que desde cada asociación, cooperativa, grupo cultural, deportivo o juvenil, fundación, empresa o comercio; desde cada sección o desde cada local sindical, desde cada agrupación local o sectorial de cada fuerza política, desde ayuntamientos y consejos comarcales, o desde el mundo de la enseñanza ?, vayáis a la web http://www.tanquemlesnuclears.org/ y apoyéis el texto básico que denuncia esta decisión irracional, y que os reproducimos a continuación.

DEMANDA:

El próximo 1 de octubre el gobierno del Estado debe decidir si renueva o no el permiso de funcionamiento de la central nuclear de Ascó, en la Ribera d’Ebre, Tarragona.

Ascó es una central con deficiencias de estructura. Ha acumulado casi un centenar de problemas de funcionamiento en los últimos 4 años. El más grave, el 26 de noviembre de 2007, con una fuga masiva de partículas radiactivas que contaminó los edificios y el entorno, llegando hasta la costa. La dirección de la central y el Consejo de Seguridad Nuclear escondieron la contaminación durante más de 4 meses, poniendo en peligro el medio ambiente y la salud de la población, hasta que Greenpeace denunció lo ocurrido. Aún se está pendiente de que se depuren las responsabilidades legales.

Además, Ascó está construida sobre un terreno inestable, lo que aumenta el peligro.

La catástrofe de Fukushima, en Japón, es una nueva demostración de cómo un accidente nuclear se convierte en una catástrofe permanente: durante décadas la vida resulta afectada, la población debe ser desplazada, y la contaminación se dispersa en miles de kilómetros, afectando el aire, el agua y los alimentos. En Cataluña ya tuvimos una seria advertencia en octubre de 1989, con el accidente nuclear de Vandellós 1.

Ascó lleva funcionando 29 años, y dejará como legado un mínimo de 1300 toneladas de residuos radiactivos que se deberán de mantener en un lugar seguro, ya que emitirán radiación durante miles de años. Cada año que funciona, la central añade unas 50 toneladas más de estos residuos a los que ya existen.

La electricidad que produce Ascó puede ser sustituida por la que generan otras tecnologías que no son tan peligrosas: centrales de cogeneración con gas, hidráulicas, eólicas, solares o geotérmicas. De hecho, las numerosas veces en que la central ha estado parada no se ha notado en el suministro eléctrico.

Por todo ello pedimos que no se conceda la renovación del permiso de funcionamiento de Ascó, el 1 de octubre de 2011. Cataluña, verano de 2011.

Más información sobre la situación de Ascó a: http://www.tanquemlesnuclears.org/campanyes/asco/ascoapunt.html

  • Confederació General del Treball de Catalunya (CGT)
  • Comitè Confederal – Secretariat Permanent.
  • Secretaria d’Acció Social