M. L. BARRERA – LAS PALMAS DE GRAN CANARIA Un marinero coreano de unos 60 años de edad murió al mediodía de ayer en el puerto grancanario de La Luz y Las Palmas como consecuencia de una fuga de amoniaco, producto que se utiliza en instalaciones de frío industrial, cuando trabajaba en una de las bodegas de un buque pesquero de bandera china atracado en el muelle Pesquero, informaron fuentes de los bomberos de la capital grancanaria, cuyos agentes rescataron al hombre con vida y lo evacuaron hasta la cubierta, en donde se produjo el óbito como consecuencia de las graves quemaduras internas y externas ocasionados por la inhalación y exposición al mencionado producto químico.
El accidente laboral, que es objeto de investigación por la Inspección de Trabajo, se produjo poco antes de las diez de la mañana, cuando la torre de control de la Autoridad Portuaria es alertada de una fuga de amoniaco en las bodegas del pesquero chino Qwang il 3. Al tiempo que se pasaba aviso al Servicio de Urgencias Canario, los bomberos del Parque del Puerto desplazaban a la zona a cuatro agentes y un cabo a bordo de tres vehículos.
Aunque se trataba de un accidente por fuga de productos químicos, en los que se deben observar determinadas medidas de precaución, los bomberos, ante la sospecha de que el marinero todavía estuviera con vida, decidieron utiliza el equipo básico y un sistema autónomo de respiración para descender a las bodegas.
Según los datos obtenidos por este periódico, cuando los agentes llegaron al lugar observaron que el hombre todavía se encontraba con vida, aunque ya agonizaba. Entonces, antes de utilizar camillas, decidieron cargarlo sobre los hombros de uno de los agentes, al tiempo que le suministraban oxigeno, para llevarlo hasta la cubierta a través de los angostos pasillos de la embarcación pesquera.
Ya en el exterior de la embarcación les esperaban los equipos sanitarios, que pusieron en marcha distintas maniobras de reanimación que finalmente resultaron infructuosas.
Según pudo conocer este periódico, el marinero presentaba graves quemaduras en su superficie corporal por su prolongada exposición al amoniaco, un producto que al contacto con la piel o mucosidades produce un efecto idéntico a la permanencia a una temperatura por debajo de los 0 grados.
A primera hora de la tarde de ayer se produjo el levantamiento del cadáver para su traslado al Instituto Anatómico Forense con el objetivo de ser sometido a autopsia y conocer las causas del accidente.
En el lugar del suceso también se personaron agentes de la Guardia Civil con el objetivo de realizar un informe del accidente que costó la vida a este trabajador de nacionalidad coreana.
Fuente: laprovincia.es
