La Unión Europea y 22 de sus estado miembros, entre ellos España, firmaron en Japón el tratado ACTA (Acuerdo Comercial contra la Falsificación), el cual limitaría el acceso a Internet a los usuarios que descarguen material con derechos de propiedad, luego de dos advertencias.

Para ello, los proveedores de Internet tendrían que ofrecer información personal de sus clientes a las autoridades.

Tras conocerse la noticia, activistas cibernéticos lanzaron un ataque contra el sitio web del Parlamento Europeo.
Según información de European News, el portal recibiría 300,000
llamadas por segundo, seis veces el nivel habitual, en su momento más
alto.

El ataque fue acreditado a Anonymous, que se deslindó a
través de un mensaje en la red social Facebook, según reportó la agencia
AFP.

Tras conocerse la noticia, activistas cibernéticos lanzaron un ataque contra el sitio web del Parlamento Europeo.
Según información de European News, el portal recibiría 300,000
llamadas por segundo, seis veces el nivel habitual, en su momento más
alto.

El ataque fue acreditado a Anonymous, que se deslindó a
través de un mensaje en la red social Facebook, según reportó la agencia
AFP.

El relator del #ACTA en el Parlamento Europeo dimite y denuncia maniobras para imponer el tratado

El eurodiputado Kader Arif ha presentado su dimisión como “relator” del ACTA
en el Parlamento Europeo y lo ha hecho denunciando de “la manera más
fuerte posible” todo el proceso que ha conducido a la firma del acuerdo que hoy han firmado en Japón la mayoría de gobiernos europeos, entre ellos España. Un proceso que ha calificado de “farsa”.

El eurodiputado denuncia la no inclusión de organizaciones de la sociedad civil, la falta de transparencia desde el inicio de las negociaciones,
las imprevistas modificaciones de la agenda, la exclusión de las
demandas del Parlamento de la UE que se expresaron en varias ocasiones
en la Cámara que debería representar al pueblo europeo.

¿QUÉ ES AL ACTA?

El ACTA es un acuerdo comercial que pretende combatir el tráfico de falsificaciones y la violación de la propiedad intelectual.

Según
sus detractores, el ACTA admitiría nuevas sanciones penales para
obligar a los proveedores de Internet a vigilar los contenidos en
Internet, lo que supondría una merma en la libertad de expresión y un
incremento de la inseguridad jurídica ya que autorizaría a los titulares
de derechos a obtener información sobre los infractores en la Red por
parte de los operadores.

Sin embargo, John Clancy, portavoz de
la Comisión de Comercio afirmó que el tratado “no restringe la libertad
de Internet ni propone la censura de webs, si no busca garantizar que las organizaciones criminales sean perseguidas cuando roban la propiedad intelectual, dañando la innovación y destruyendo empleo.”

“Los ciudadanos podrán seguir usando las redes sociales como Facebook o Twitter como en el pasado”, aseguró el funcionario.

La
firma del tratado por parte de la UE debe ser ratificada por el
Parlamento Europeo en junio. Mientras tanto, ya fue firmado por otros
países como Estados Unidos, Canadá y Japón.

Los países miembro de la UE que no han firmado el ACTA son Holanda, Chipre, Eslovaquia, Estonia y Alemania, aunque se espera que lo hagan en un futuro cercano.

Organizaciones
opuestas al tratado preparan movilizaciones para intentar frenar la
ratificación. Según la UE, se trata de un simple retraso por razones de
procedimiento.

En Polonia ya hace días que se han organizado movilizaciones contra ACTA.

En
España, la Asociación de Internautas ha mantenido una postura
totalmente contraria a que prospere ACTA en el Parlamento Europeo.

En http://eleconomista.com.mx/tecnociencia/2012/01/26/firman-22-paises-europa-tratado-acta