MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
España fue el país de la Unión Europea (UE) donde más contratos temporales se firmaron en 2003 ya que representaron el 30,6 por ciento de todas las contrataciones realizadas, muy por encima de la media comunitaria situada en el 12,9 por ciento, según datos publicados ayer por la oficina de estadística europea, Eurostat. Las mujeres aceptaron un mayor número de contratos temporales que los varones europeos que se decantaron por los fijos.
MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) –
España fue el país de la Unión Europea (UE) donde más contratos temporales se firmaron en 2003 ya que representaron el 30,6 por ciento de todas las contrataciones realizadas, muy por encima de la media comunitaria situada en el 12,9 por ciento, según datos publicados ayer por la oficina de estadística europea, Eurostat. Las mujeres aceptaron un mayor número de contratos temporales que los varones europeos que se decantaron por los fijos.
No solo España registra un elevado porcentaje de empleo temporal, por encima de la media se sitúan Portugal (20,6 por ciento), Polonia (19,4 por ciento) y Finlandia (16,3 por ciento). En el otro extremo se situó Estonia, donde sólo el 2,5 por ciento de los contratos tenía una duración determinada ; seguido de Luxemburgo (con un porcentaje del 3,2 por ciento), y Malta con un 3,6 por ciento.
Las principales economías europeas no tuvieron índices superiores a la medida europea del 12,9 por ciento. Así Francia registró un nivel de contratación temporal en 2003 del 12,7 por ciento, seguido de Alemania (12,4 por ciento), Italia (9,9 por ciento) y Reino Unido (6,1 por ciento).
MUJERES MAS TEMPORALES
En el conjunto de la UE, las mujeres aceptaron más empleos temporales que los varones europeos, ya que los porcentajes varían del 13,7 por ciento para ellas, al 12,2 por ciento para ellos. En España las diferencias fueron algo mayores ya que alcanzaron un 33,5 por ciento y 28,6 por ciento, respectivamente.
El informe presentado también permitió conocer las diversidades entre los países miembros en cuanto a los empleos a tiempo parcial.
Las tasas más elevadas se registraron en Holanda (32,8 por ciento), Reino Unido (17,4 por ciento) y Suecia (16 por ciento). Por el contrario, tres países de la Europa ampliada junto a Grecia presentaron las cifras más bajas entre los Veinticinco : Eslovaquia (1,3 por ciento) ; Hungría (2,1 por ciento), Grecia (2,3 por ciento) y República Checa (2,9 por ciento). La media europea se situó en el 10,3 por ciento, cifra superior a la de España, que registró un 4,7 por ciento.
En lo que se refiere a la tasa de empleo entre las personas de 15 a 64 años, España registró un 59,7 por ciento, un índice inferior al de la media de los Veinticinco, que alcanzó el 63 por ciento, según Eurostat. Las cifras españolas se situaron, por tanto, lejos de las observadas en Dinamarca, un 75,1 por ciento ; Holanda (73,5 por ciento) o Suecia (72,9 por ciento). En cambio, las tasas de empleo más bajas en este segmento de edad se observaron en Polonia (51,2 por ciento), Malta (54,2 por ciento) e Italia (56,1 por ciento).
Por géneros, España se sitúo entre los países con mayores diferencias. Así, en 2003 la tasa de empleo masculina alcanzó el 73,2 por ciento, mientras que la femenina se estancó en el 46 por ciento.
En el conjunto de la UE, estas cifras fueron del 70 y 55 por ciento, respectivamente. Grecia y Portugal presentaron desigualdades similares al caso español. En el otro lado de la tabla, Suecia y Dinamarca obtuvieron los mejores resultados de empleo femenino : 71,5 y 70 por ciento, cada uno.
En la otra cara de la moneda se situaron los 19,1 millones de parados que había en 2003 en la UE, (el 4,1 por ciento de la población en edad de trabajar) y los 6,8 millones de personas que se encontraban buscando un trabajo (el 19,6 por ciento de la población activa). En España, la tasa de paro de larga duración se situó en el 3,9 por ciento.
Par : _ PIELROJA