•  ¿Qué razones han llevado a la CONAIE a defender un “sí crítico” ante el referéndum al nuevo proyecto de constitución a celebrar el próximo 28 de septiembre ?

    La CONAIE promovió desde los años 90 una Asamblea Constituyente que incluyera a todos los sectores marginados, lo cual no se dio en el 98. En esta constitución la CONAIE implementó un proceso de seguimiento a la Asamblea Constituyente con una propuesta incluyente, diversa, pero que desde la visión de los poderes económico...

  •  ¿Qué razones han llevado a la CONAIE a defender un “sí crítico” ante el referéndum al nuevo proyecto de constitución a celebrar el próximo 28 de septiembre ?

    La CONAIE promovió desde los años 90 una Asamblea Constituyente que incluyera a todos los sectores marginados, lo cual no se dio en el 98. En esta constitución la CONAIE implementó un proceso de seguimiento a la Asamblea Constituyente con una propuesta incluyente, diversa, pero que desde la visión de los poderes económico…

  •  ¿Qué razones han llevado a la CONAIE a defender un “sí crítico” ante el referéndum al nuevo proyecto de constitución a celebrar el próximo 28 de septiembre ?

    La CONAIE promovió desde los años 90 una Asamblea Constituyente que incluyera a todos los sectores marginados, lo cual no se dio en el 98. En esta constitución la CONAIE implementó un proceso de seguimiento a la Asamblea Constituyente con una propuesta incluyente, diversa, pero que desde la visión de los poderes económicos y del poder central del Estado fue bastante criticada al verse como algo centrado en lo indígena, aunque se trataba de una propuesta a nivel nacional.

    Las decisiones no las tomamos los dirigentes unilateralmente. Hemos tenido que consultar a todas las confederaciones, bases, nacionalidades, pueblos y con todos los dirigentes, a quienes les dijimos que ellos debían decidir por el sí o el no. Son esas bases las que han dicho que podemos apoyar el sí a la constitución, más por el tema del carácter plurinacional del Estado. Pero no vamos a apoyar las políticas de aplicación pública del Gobierno nacional ya que éste ha minimizado al movimiento indígena y a todos los sectores progresistas que lo han estado criticando constructivamente. Por eso vamos a apoyar el sí pero damos críticas al Gobierno para que dé cambios estructurales en materias como los recursos naturales o la privatización de empresas estatales.

  •  ¿La declaración del Ecuador como Estado plurinacional aparece únicamente a nivel formal en el primer artículo del proyecto de Constitución o lo hace a nivel integral ?

    En el proyecto de constitución aparecen por ejemplo las circunscripciones territoriales indígenas, pero no el manejo de los territorios ancestrales o de los recursos naturales que hay en ellos. Ahora es aún peor con esta posición de no tener nosotros el derecho a ser consultados y a decidir el destino de nuestro territorio. Reconoce las nacionalidades a los pueblos, su estructura política y administrativa, pero no reconoce la aplicación de esto en el ámbito territorial.

  •  Vds. denuncian que el derecho a la consulta previa, libre e informada, tal y como aparece en el Convenio 169 de la OIT, no ha sido incluido en el texto.

    Por esta cuestión tuvimos que romper diálogos con el Gobierno nacional. En la Asamblea Constituyente estaba entrando pero al final lo eliminaron e incluyeron un artículo del que no sabíamos nada. En la Declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas de la ONU de 2007 aparece este punto, por lo que el proyecto de Constitución la contradice.

  •  ¿Qué elementos positivos encuentran el proyecto de Constitución que les ha llevado a defender el sí, aunque sea crítico ?

    El aspecto económico. Las anteriores 19 constituciones se centraban en la economía de mercado y de venta de todo lo que tiene Ecuador en su territorio. Ahora la economía cambia a un modelo de función social que golpea al sistema económico que se ha estado manejando durante 180 años en Ecuador. Se propone hacer una economía basada en la solidaridad, en la reciprocidad, y de carácter comunitario. El movimiento indígena se apropia de esto para aplicarlo.

  •  Sin embargo Vds. denuncian que el modelo económico sigue siendo extractivista y de explotación de los recursos naturales, lo cual está a la base de la no inclusión del consentimiento previo, libre e informado en el texto constitucional.

    Efectivamente, hay contradicciones. Los recursos naturales siguen siendo el eje principal de la función económica. Y cuando se habla de recursos naturales se está hablando de la extracción de éstos en territorios indígenas, en donde se encuentran la mayor parte de ellos. El modelo sigue basándose en explotar lo más que se pueda para tener réditos económicos y no ver que ello afecta gravemente ambiental, social y culturalmente a los pueblos. Los inversionistas son los únicos beneficiados aquí ya que actualmente se llevan el 80% de los beneficios, aunque hay proyectos de ley para después de la aprobación de la constitución para que esto se quede en el 50% para ellos y el 50 % para el Estado ecuatoriano.

  •  Respecto al modelo político Vds. demandaban que la democracia representativa se volviera más participativa.

    Han creado el Consejo Nacional de Participación Social integrado por todos los sectores sociales, pero no creemos que sea el mejor modelo para asegurar su participación ya que podría volverse algo político manejado por cada gobierno de turno. La CONAIE propuso que la participación de los sectores marginados fuera directa, lo cual no fue aceptado.

  •  En el proyecto de Constitución aparecen referencias al Sumak Kawsay, que es el modelo de vida que Vds. proponen. ¿Lo hace de manera formal o está presente en la propuesta general del texto constitucional ?

    La lógica del Sumak Kawsay es la del “buen vivir”, la de vivir en un ambiente sano, comer bien, tener un espacio de vida, una educación acorde a nuestra realidad, salud… todo un conjunto de esquemas que el ser humano necesita para mantenerse y que genere la vida de las futuras generaciones. Del “buen vivir” han incluido el tema de la economía social, pero era muy difícil hacérselo entender a los asambleístas, para quienes vivir bien es tener un edificio de 50 pisos, 5 carros, viajes a Europa y Nueva York… es decir, el esquema occidental de “buen vivir” ; al que no le importa el medio y el entorno, ni si la Naturaleza sigue existiendo o no. Por ello más o menos lo acoplaron en el modelo económico : compartir equitativamente, respetar a la Madre Tierra… De ahí nace la inclusión de la Madre Tierra como sujeto de derecho y un capítulo dedicado a los Derechos de la Naturaleza.

  •  En la propuesta de la CONAIE se habla de un estado fuerte, como por ejemplo cuando defienden la nacionalización de los recursos naturales o la creación de un Consejo Nacional de Planificación. ¿Cómo se puede compaginar eso con la lucha por la autonomía, que es una lucha, en parte, por la descentralización ?

    Hay autonomía como la que pide Guayaquil que en realidad es independencia. Pero las autonomías que se pueden ejecutar son las que tienen una correlación con el eje central, que es el Estado o el Gobierno central. Lo que las autonomías generarían es que fueran parte del Estado y el Estado parte de ellas. Y en ese sentido, la redistribución debería darse por todas las provincias. En ese sentido las redes autonómicas, los pueblos indígenas, también tendrían esa participación de la economía del Estado, pero en formas de manejo territorial, decidiendo nosotros las normas internas del manejo y de la convivencia social sin esperar decisiones desde el Gobierno central. En la autonomía que nosotros pedimos tiene que haber injerencia del Estado y también participación de nosotros hacia él.

  •  ¿Que razones han llevado a la ruptura del movimiento indígena con Correa ?

    El movimiento indígena apoyó a su candidato en la primera vuelta, que era Luis Macas, ex-presidente de la CONAIE. En la segunda vuelta la única opción que quedaba era Correa y Noboa, representante de la derecha y uno de los que maneja económicamente el país. Correa entró con muchas propuestas y muchos movimientos se aliaron con él, pero en el trayecto, Correa se ha ido separando de estos movimientos. El movimiento indígena rompió su proceso de diálogo el 11 de marzo de este año. La nueva política de la CONAIE es la de tener diálogos, pero no participación en los gobiernos ya que nos obliga a ser obedientes al gobierno de turno. Pero una participación con una propuesta de la CONAIE que obedezca al colectivo de la sociedad marginada hace que los representantes que vayan al gobierno obedezcan al colectivo. Así, hasta que el Gobierno diga, “vengan a participar, pero Vds. van a obedecer a la realidad de Vds.”, no vamos a participar con ellos. Y peor ahora que Correa dice que somos el 2% y que no podemos ponerle agenda a él, que somos “ecologistas infantiles”, que los que defienden derechos humanos son los que generan el caos en el país, que son unos subversivos… A ese nivel nosotros no podemos dialogar con el Gobierno. El Gobierno ha de escuchar la voz del pueblo, que es la que puede generar cambios sin perderse en el poder y el ego.

    Tenemos la experiencia de Sociedad Patriótica, a través de la cual muchos ministerios estuvieron en manos de indígenas. Pero a los seis meses el Gobierno les “mandó” y rompió al movimiento indígena dejándolo en la quiebra. Y no queremos que eso vuelva a suceder. Queremos que haya participación, pero desde nuestra perspectiva, no desde la del Gobierno.

  •  La alianza con Lucio Gutiérrez la califican como un error histórico que ha dividido al movimiento indígena.

    En tiempos de Lucio Gutiérrez yo era Presidente de Sarayacu[1]. Como 17 de sus dirigentes fuimos perseguidos mientras a los dirigentes nacionales los tenía como aliados. Lucio Gutiérrez trazó una estrategia para romper el esquema de unidad en las (confederaciones) regionales : Amazonía, Sierra y en la Costa. Y lo hizo situando a indígenas como ministros y viceministros que eran aceptados por unas nacionalidades y otras no. Por ejemplo, la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (CONFENIAE) se fracturó. El movimiento indígena se fue “de picada”. Pero las comunidades siguieron fuertes. Por todo aquello que pasó, nosotros tenemos ahora distancia con el Gobierno. Ahora el único lugar en el que no hay unidad es en la CONFENIAE, pero en octubre habrá un nuevo Congreso convocado por la CONAIE para superar esa fractura. Además cambiará el nombre por Consejo Regional de Pueblos y Nacionalidades de la Amazonía, con un esquema estructural diferente al actual, que es occidental y que también nos afectó en el proceso de ruptura.

  •  Teniendo en cuenta que desde los 90 Vds. han sido la fuerza social más fuerte de Ecuador, ¿cómo ha afectado al movimiento indígena el hecho de que llegue al Gobierno un presidente que es considerado de izquierdas ?

    El 11 de marzo pasado convocamos una marcha y tomamos la ciudad. El Gobierno vio que el movimiento indígena está nuevamente creciendo y que tiene la capacidad de paralizar el país si el Gobierno de Correa empieza a actuar como los antiguos gobiernos. Las bases están sólidas. Se está dando la recuperación de la fuerza del movimiento indígena. Antes hubo presencia de los gobiernos en el movimiento indígena para poner presidentes. Ahora cambió el esquema. Del distanciamiento que yo tengo con el Gobierno vuelve a nacer la esperanza en las nacionalidades. He caminado por las tres regiones y eso es lo que esperaban. Y eso es lo que el Gobierno teme. Ni yo ni nuestras nacionalidades tenemos ningún compromiso con él, por eso nuestros reclamos en el campo de la minería, de los pueblos en aislamiento voluntario, del ITT[2]… Los principios de la CONAIE nuevamente se han puesto en el tapete de la vida nacional.

  •  ¿Qué opinión tiene Vd. acerca del llamado socialismo del s. XXI ? ¿Integra las propuestas indígenas o, por ejemplo, suponen una continuidad en las políticas extractivistas ?

    En América Latina, sin el movimiento indígena ningún Gobierno puede hacer cambios. El socialismo del s. XXI es un socialismo camuflado que aún tiene el esquema neocolonial, neoliberal. Frente a ello la propuesta indígena es la de cambiar los esquemas estructurales, la lógica del pensamiento. Boaventura de Souza dice que el único que puede frenar el calentamiento global es el pensamiento de los pueblos indígenas. El socialismo del s XXI tiene muchas trampas que lo acercan más al capitalismo que al socialismo.


    [1] Comunidad kichwa de la amazónica Provincia de Pastaza que consiguió expulsar a la compañía petrolera argentina CGC de su territorio.

    [2] Bloque petrolero situado al este del Parque Nacional Yasuní y parte de la declarada Zona Intangible, habitada por pueblos en aislamiento voluntario. Desde el Gobierno se ha retomado una iniciativa, surgida de colectivos ambientalistas, de mantener el crudo en el subsuelo a cambio de una indemnización venida de la comunidad internacional que suponga la mitad de los beneficios anuales que se obtendrían de su explotación (700 millones de dólares). Correa ha declarado que si no se da esta circunstancia en enero del próximo año se concederá la licencia de explotación.


    Fuente: Sergio de Castro, Mayka de Castro y Marc Delcan