Según el relator de la ONU contra el racismo «todavía hay mucho que hacer para evitar las situaciones discriminatorias contra los inmigrantes» | Doudou Diène cree que «la identidad europea, fundamentada en la raza blanca y el cristianismo, se debería transformar»
El relator de las Naciones Unidas contra el racismo, Doudou Diène, ha advertido este miércoles que, por lo que ha podido observar, «en España hay fuerzas políticas que utilizan el racismo para hacer política», y se ha mostrado partidario de construir una nueva identidad europea más plural.
Según el relator de la ONU contra el racismo, que este mediodía ha visitado el Parlamento catalán y se ha reunido con el conseller de Interior y Relaciones Institucionales, Joan Saura, y con el presidente de la cámara legislativa, Ernest Benach, en Cataluña y en el resto de España «todavía hay mucho que hacer para evitar las situaciones discriminatorias contra los inmigrantes».
Después de advertir que «en España hay fuerzas políticas que utilizan el racismo para hacer política», ha indicado que «la xenofobia y el racismo son dos cuestiones muy importantes que están relacionadas con la marginación social y económica de las minorías».
«La inmigración es una oportunidad de desarrollo para el receptor»
En su opinión, «la inmigración, en realidad, es una oportunidad para el desarrollo económico de los países receptores», y se ha mostrado muy crítico «con el hecho de que en Europa hay fuerzas que construyen la identidad de forma cerrada, basándose exclusivamente en el cristianismo, lo que va en contra de la diversidad étnica y religiosa».
Por esto, ha explicado, hay dos retos : «el primero -ha dicho- es admitir que esta identidad europea, construida sobre todo sobre la raza blanca y el cristianismo, se debería transformar».
«Estamos en un momento que es como el parto de una nueva identidad, y como sabemos, todos los partos son dolorosos, pero el problema es que esto lo pagan los inmigrantes, como se ha visto con la ’directiva de la vergüenza’ de la UE», ha recalcado el relator de la ONU. La directiva a la que se refiere es la que implica aumentar el tiempo de retención de los «sin papeles», así como restringir la entrada de inmigrantes en los países comunitarios.
«Hay que tener en cuenta -ha añadido- que España forma parte de Europa y, cuando en Francia y en la UE se niegan a reconocer las lenguas regionales, esto pone de manifiesto una ideología dominante discriminatoria».
Fuente: EFE