El sindicato CGT Huelva, en palabras de trabajadores afiliados a nuestro sindicato, denuncian como los propietarios de Sierra Solar Energía S.L., no abonan las nóminas a los empleados desde el pasado mes de junio, además de no pagar tampoco los conceptos de combustible, material, vivienda y diversos gastos derivados de la actividad, gastos que debe abonar la empresa por contrato. Igualmente se denuncia que tampoco se han pagado las horas extras ni dietas realizadas por trabajadores desplazados a Francia en dos proyectos fotovoltaicos.

Según los trabajadores no solo deben estos conceptos, sino que unos 20 exempleados, la mayoría de origen subsahariano, tienen denunciada a la empresa por impagos, la plantilla afirma que pareciera que los responsables de la sociedad se encuentran cómodos con la situación, ya que no contesta a las repetidas llamadas telefónicas con las reivindicaciones legitimas de los empleados, los cuales a lo largo de estos últimos meses han estado asistiendo frecuentemente a las puertas de las oficinas con sede en Rosal de la Frontera, sin que se les atienda por parte de la misma.

Desde CGT Huelva, su secretario general, Francisco Martín, denuncia como gran parte de los alojamientos destinados para el personal no cumplen con las mínimas medidas de salubridad, como falta de agua caliente, menaje de cocina, o ausencia de nevera durante la época de calor, tampoco se salvan los vehículos de la empresa, en un estado pésimo, con el  correspondiente riesgo para la integridad física de los trabajadores.

Francisco Martín, anuncia las correspondientes denuncias ante inspección de trabajo y en los juzgados, así como movilizaciones contra esta empresa, la cual según la opinión de cgt actúa como si los trabajadores fueran “esclavos”. Algunos operarios están sufriendo situación de exclusión social o recibiendo ayuda solidaria de alimentos por la falta de pago de la empresa.

Así mismo el secretario general de CGT en Huelva, denuncia que nuestra responsable en Sierra Solar Energía S.L. ha sido despedida por reivindicar y denunciar estos abusos, a entender según afirmaciones de Francisco Martín,  sería un despido de pleno derecho  «nulo”,  y recuerda que la empresa podría estar incurriendo en un delito de persecución laboral.

 


Fuente: CGT-Huelva