Los operarios de la limpieza viaria de Basauri y la empresa Ferroser ya tienen en sus manos la decisión tomada por el Departamento de Trabajo sobre los servicios mínimos que regirán la huelga indefinida que dará comienzo esta misma noche. Tras una semana de contactos, en los que ambas partes no llegaron a ningún acuerdo de última hora que dejara en suspenso el paro, el Gobierno vasco se vio obligado a intervenir y a fijar los turnos de trabajo extraordinarios que deberán cumplir los barrenderos y basureros de la localidad.
Los técnicos del Ejecutivo autónomo han previsto que los camiones de recogida sólo circulen dos días a la semana, lunes y viernes, por lo que el resto de la semana los desperdicios permanecerán en la calle, ya que Basauri carece de contenedores y las bolsas se depositan en plena acera. Como referencia, en circunstancias normales, en estas labores participan a diario tres vehículos con sus respectivas dotaciones.
Con respecto a los equipos de limpieza viaria, los técnicos de Trabajo han ordenado que la plantilla habitual quede reducida a únicamente 3 operarios, que adecentarán las calles cada tres días. Las fechas exactas serán determinadas por la compañía. « Nosotros acatamos la decisión del Gobierno vasco y cumpliremos los servicios mínimos a rajatabla. Pero al mismo tiempo, seguiremos a la espera de recibir una propuesta de negociación de la empresa para sentarnos en una mesa », explicó Txutxi Villaverde, delegado sindical de CGT en Ferroser.
Vuelta a los paros
Las consecuencias de esta huelga ser verán agravadas el día 23 con la vuelta al paro de los empleados de la limpieza de los edificios públicos y municipales. Los sindicatos convocantes, tras acatar el fallo del juez que declaró ilegal las anteriores movilizaciones, han confirmado que los operarios dejarán de trabajar de manera indefinida a partir de esa jornada.