Se sienten impotentes ante la evidencia de que el cuerpo será finalmente reestructurado
La sección sindical de la CGT en la Guardería Forestal ha anunciado su decisión de no volver a concentrarse diariamente ante la puerta del Ayuntamiento ante la impotencia de ver que el cuerpo será finalmente reestructurado (pasando de 20 a 8 agentes) y por no poder continuar, materialmente, con este tipo de movilizaciones. Esto no indica, sin embargo, que los guardas forestales vayan a ceder en sus reivindicaciones como lo han venido haciendo hasta ahora : mantener la estructura actual del servicio, conseguir la dotación de material suficiente como para desarrollar sus funciones y adaptar sus categorías profesionales como agentes de la autoridad.
Se sienten impotentes ante la evidencia de que el cuerpo será finalmente reestructurado

La sección sindical de la CGT en la Guardería Forestal ha anunciado su decisión de no volver a concentrarse diariamente ante la puerta del Ayuntamiento ante la impotencia de ver que el cuerpo será finalmente reestructurado (pasando de 20 a 8 agentes) y por no poder continuar, materialmente, con este tipo de movilizaciones. Esto no indica, sin embargo, que los guardas forestales vayan a ceder en sus reivindicaciones como lo han venido haciendo hasta ahora : mantener la estructura actual del servicio, conseguir la dotación de material suficiente como para desarrollar sus funciones y adaptar sus categorías profesionales como agentes de la autoridad.

El representante de los forestales, Rafael Gómez, ha señalado que no tiene sentido continuar con las concentraciones, dado el escaso apoyo que están teniendo por parte de los partidos de la oposición (sólo a través de comunicados de prensa) y el «absoluto aislamiento» que sufren por parte de CC.OO.. Aún así, desde la Guardería Forestal se quiere dejar claro que, en el futuro, tanto el alcalde, Enrique Moresco, como el jefe de servicio de Medio Ambiente, Antonio Caraballo, serán los responsables del «deterioro que padezcan los ecosistemas de la ciudad o del regreso de los cazadores ilegales». Además, los responsables municipales «tendrán que responder ante los ciudadanos por la monstruosidad que van a cometer con el medio ambiente portuense».

Gómez lamenta que «25 años de trabajo acaben en la basura».


Fuente: A. Barragán / Diario de Cádiz