El buque de ISCOMAR no tiene gasoil para mantener los servicios esenciales a bordo La familia Seguí se desentiende de sus trabajadores y amenaza a un tripulante. SA NOSTRA INVERSIONES, propietaria al 100% no atiende a las llamadas del Capitán del buque.
ISCOMAR ha comunicado a la tripulación del MERCEDES DEL MAR que no piensa “poner un duro más” para combustible, agua y comida. Y SA NOSTRA no parece estar interesada en un buque que es propiedad suya
El jueves 22 de octubre, soplaban rachas de fuerza 8 – 9 de poniente, alcanzando velocidades de más de 40 nudos. Los cabos del MERCEDES DEL MAR comenzaron a partirse ante el empuje del viento sobre la obra muerta del buque. La tripulación, que lleva sin cobrar desde junio, prestos a cumplir profesionalmente con su trabajo, reponen las estachas trinchadas, siendo necesario la intervención de un remolcador de puerto, avisado ante la emergencia y prestando su servicio ante la urgente necesidad (única razón para actuar con un barco de ISCOMAR, ya que ante el impago sufrido tienen autorización de la Autoridad Portuaria para negarse a prestarles el servicio de remolque portuario.
Ya sufrieron situación parecida el pasado 17 de septiembre, cuando otro temporal azotó la costa levantina. En esa ocasión, si cabe, estuvieron más cerca del desastre. Los tripulantes que resisten a bordo, en número escaso para las necesidades habituales de un buque de estas características, se tuvieron que emplear a fondo para reforzar amarras.
Como contrapartida a su responsabilidad, la empresa les comunica que no piensa pagar más suministros de combustible u otras necesidades. Esta semana ya sufrieron el apagón de dos días, sin combustible no hay luz, ni otros servicios. A la penosa situación que están pasando los tripulantes del MERCEDES DEL MAR se le añadió la falta absoluta de condiciones de habitabilidad a bordo, los WC inutilizados, sin TV, comunicaciones, alumbrado, etc.
Además esta situación deja al buque con una notable indefensión ante cualquier percance que pueda afectar gravemente a la seguridad del mismo o de otros buques cercanos. Sin combustible, y por tanto sin máquinas principales ni auxiliares, no hay capacidad de maniobra, ni posibilidad de usar maquinillas o cabrestantes, ni cabe poner en marcha las bombas de achique o los sistemas contraincendios, es decir, un problema que trasciende al MERCEDES DEL MAR y a sus tripulantes, aunque ellos son sin duda los rehenes del actual estado de cosas. Como respuesta, las administraciones aplican la política del avestruz, y suponemos que cruzan los dedos “esperando que no pase nada”, hasta que pasa.
Los tripulantes, por su parte, insisten en mantener a flote su dignidad, reclaman respuestas, pero ni las Administraciones que tan condescendientes han sido con CONTENEMAR / ISCOMAR permitiendo el actual estado de cosas, ni la familia SEGUI, ni la propia SA NOSTRA de INVERSIONES responden.
Esta última entidad, rama financiera de la caixa SA NOSTRA de Baleares, y propietaria al 100% del buque MERCEDES DEL MAR no atiende a las llamadas del Capitán el cual confía hacerles llegar su preocupación por algo que en buena lógica tiene como mínimo un importante valor económico (estimamos que la deuda de MEYKEL con SA NOSTRA podría rondar los 5 millones de euros), como si el asunto no fuera con ellos, o como si les importara muy poco que se fuera al garete.
Otros buques siguen rumbos paralelos. El ISABEL DEL MAR, el JULIA DEL MAR y el TERESA DEL MAR, permanecen en el puerto de Barcelona, sin destino y con un futuro incierto para ellos y para la Gente de Mar que los ha cuidado, mimado y sufrido durante años.
Los responsables de ISCOMAR / CONTENEMAR, Andrés, Pablo, Pedro y Catalina Seguí Soloaga y Gabriel Malvido Seguí, entre otros (tanto monta, monta tanto), no atienden a nadie, no pagan, no dan soluciones, no cubren tan siquiera las necesidades básicas de los que trabajan para ellos, ni tan siquiera suelen coger el teléfono. Pero en cambio si tienen tiempo y recursos para amenazar a un tripulante peruano e incluso denunciarlo a la Policía bajo la falsa acusación de situación ilegal, en una actuación tan absurda que sólo cabe interpretarla en alguien que se cree con derecho a todo y que los demás son lacayos a su servicio. El “crimen” cometido por el tripulante, ha sido rechazar la oferta de pagarle sólo un mes de salario (del total de cuatro que le adeudan) y el billete para su casa, su osadía, la de plantear que él no se va si no le pagan todo aquello que se ha ganado honradamente.
Para más inri, resulta incomprensible que la Administración, ante este desastre, permita a los mismos responsables de unas actuaciones que han generado enormes deudas públicas (que pagaremos todos) y privadas, y causado la ruina a muchos ciudadanos, seguir operando con tota impunidad en los puertos de Sagunto y Alicante a través de la empresa AFRICA CONTAINERS LINE (cuyo administrador único es Andrés Seguí Soloaga), fletando buques y moviendo cargas a Canarias y a África sin mayores problemas.
Desde aquí animamos a que continúen las muestras de aliento hacia los trabajadores afectados y exigimos a las administraciones a que tomen medidas urgentes para atender a las necesidades inmediatas de los tripulantes y a establecer mecanismos de solución que permitan finalizar este lamentable proceso, y que aseguren que los culpables de lo ocurrido no salgan impunes.
El STMM CGT seguirá prestando su apoyo total a los tripulantes y trabajadores, agradece la solidaridad de todos aquellos que de forma desinteresada están aportando alimentos u otras necesidades básicas a los tripulantes.
Así mismo CGT ha iniciado una campaña interna de recogida de fondos dirigido a cubrir lo más prioritario.
Sindicato de Trabajadores de la Marina Mercante – CGT
Fuente: STMM - CGT