El desprendimiento de una placa metálica de las que conforman el techo del cuarto de preparación de frío en la cocina del Río Hortega ha provocado heridas en dos trabajadores de este servicio, uno de los cuales se encuentra actualmente de baja laboral.
Las personas afectadas fueron una pinche y un cocinero que fueron golpeados directamente por la placa ; lo que les ocasionó un golpe en el hombro y una herida inciso contusa en la cara, respectivamente, según los datos facilitados por la denuncia de la CGT.
El hospital explica que el accidente laboral tuvo lugar el pasado día 17 de mayo y que los servicios de mantenimiento del Río Hortega « se personaron inmediatamente en la cocina, comprobando que la caída de dicha placa se debió a una colocación inadecuada de la misma, ya que las muescas de sujeción en dos de los lados no se hicieron coincidir correctamente con el perfil asignado, es decir, que la placa estaba girada sobre su posición correcta ; lo que provocó que ésta se moviera y quedara incorrectamente sujeta », según indican fuentes de Sacyl.
La Administración sanitaria advierte asimismo que esta situación « no podía ser detectada en las inspecciones realizadas previamente a la recepción de la obra » y que, por tanto, « no se trata de un defecto constructivo del complejo hospitalario, sino de un fallo humano en el proceso de montaje del techo ; lo que técnicamente se denominan ’vicios ocultos’ », añaden las mismas fuentes.
El hospital ya se ha puesto en contacto con la empresa adjudicataria de la cocina, que fue a su vez la encargada de la realización de la obra, para que lleve a cabo la revisión de todos los techos de la cocina y compruebe así su adecuada colocación. En el caso de constatar alguna irregularidad más, adoptaría las medidas correctoras necesarias. Indica asimismo, que la revisión del montaje se realizará bajo la supervisión del Servicio de Mantenimiento del centro.
Además, el Río Hortega reclamará a la empresa adjudicataria cuantas responsabilidades se deriven de este suceso. La Confederación General del Trabajo (CGT) denuncia asimismo que este accidente supone « un atentado más contra la seguridad y la salud de los trabajadores ». Además de las lesiones ocasionadas a los dos trabajadores, este sindicato destaca « el miedo insuperable a que los desprendimientos continuaran » ; lo que « distrajo la atención del personal de cocina y el servicio prestado pudo generar errores y repercutir directamente en los usuarios del hospital ».
Indican además estos representantes de los trabajadores que este siniestro « es sólo una muestra más de las deficiencias repetidas veces denunciadas por esta sección sindical » y destaca que el desprendimiento de parte del techo de un hospital que se puso en marcha el pasado mes de noviembre « indica la precipitación habida en la apertura del Río Hortega, la irresponsabilidad de la Consejería de Sanidad al aceptar una obra que se manifiesta deficitariamente concluida y del Comité de Seguridad y Salud, en caso de que no lo haya denunciado, al no tener en cuenta los riesgos que dichas deficiencias e irregularidades representan para los trabajadores del centro ».
La obra fue adjudicada en noviembre del 2006 por un importe de 1.669.000 euros. El espacio destinado a este servicio, 1.100 metros cuadrados, supuso un importante aumento respecto a los 600 de la vieja Residencia y está distribuida en dos niveles, el bajo para producción y, el primero, para oficinas. Sanidad ya tuvo que intervenir en las cocinas, antes de abrir el hospital, y tirar una planta.
La obra fue adjudicada en noviembre del 2006 por un importe de 1.669.000 euros. El espacio destinado a este servicio y 1.100 metros cuadrados
Fuente: ANA SANTIAGO | VALLADOLID | EL NORTE