Los miembros del Comando Barcelona de ETA Fernando García Jodra y Lierni Armendáriz exculparon hoy a Zigor Larredonda y Laura Riera de haber participado en los preparativos del atentado contra el concejal del PP en Viladecavalls (Barcelona) Francisco Cano Consuegra, perpetrado el 14 de septiembre de 2000. El juicio por estos hechos comenzó a celebrarse hoy por la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia Nacional.
Según afirmó García Jodra a preguntas del fiscal Enrique Molina, todas las informaciones necesarias para realizar esta acción las consiguieron los miembros del comando, compuesto por él, Armendáriz y José Ignacio Cruchaga. El fiscal acusa a los dos colaboradores de haber señalado a Cano como objetivo del comando (caso de Larredonda) y de haber facilitado los datos de la matrícula del vehículo que habitualmente utilizaba el edil (caso de Riera).
García Jodra aseguró que Larredonda no le facilitó ningún dato sobre posibles objetivos de ETA. «Todas las informaciones las conseguimos nosotros», señaló el activista de ETA refiriéndose a los tres miembros que componían el «comando Gaztelugatze» o «Barcelona». Indicó que utilizaron internet para conseguir la foto del edil y listines telefónicos para dar con su dirección.
Agregó que le esperaron un día a las puertas de la empresa de fontanería que tenía en Tarrasa para identificarle. El acusado negó que fuera Laura Riera quien facilitó al comando un listado de 106 matrículas (50 de políticos, 33 de miembros de Cuerpos de Seguridad del Estado, 7 de miembros de las Fuerzas Armadas y 16 de empresarios) entre las que figuraba la del Citroën C15 que habitualmente usaba Cano Consuegra para hacer trabajos de fontanería.
Por su parte, Lierni Armendáriz asumió la acción y, al igual que su compañero, negó la participación de los supuestos colaboradores. Laura Riera, ex trabajadora del departamento de multas del Ayuntamiento de Tarrasa, desde donde supuestamente sacó los listados de las matrículas, negó cualquier vinculación con ETA, al igual que Zigor Larredonda, quien afirmó que no pasó ninguna información a Fernando García Jodra. El acusado recordó que cuando vio su nombre en la prensa relacionado con este comando, se presentó de forma voluntaria en la Audiencia Nacional.
El fiscal solicita 47 años de cárcel para Fernando García Jodra y Lierni Armendáriz, por homicidio terrorista y estragos, y 30 años de prisión para Zigor Larredonda y Laura Riera, por homicidio terrorista.
El fiscal Enrique Molina mantiene en el escrito de conclusiones provisionales, que el etarra García Jodra captó a Zigor Larredonda, que fue quien señaló como posible objetivo al conceal del PP de Viladecavalls y elaboró informes sobre su identidad e imagen. Para ello contó con la colaboración de Riera, quien consiguió el número de matrícula de la furgoneta de la víctima valiéndose de su trabajo en el Ayuntamiento de Tarrasa, donde tenía acceso a la base general de vehículos de la Dirección General de Tráfico.
Laura Riera admitió haber consultado la base de datos de la dirección general de Tránsito para identificar a presuntos autores de varias agresiones racistas que la Plataforma Antifascista de Terrasa quería denunciar. Un miembro de la plataforma, Josep Maria Pino, citado en el juicio como testigo de la defensa, avaló esta versión. Según Pino, los datos que obtenían eran transmitidos a la unidad de investigación de los Mossos d’Esquadra especializada en grupos neonazis.
Coincidiendo con el juicio en Madrid, se vivió a realizart ayer al atardecer en el centro de Barcelona una acción de protesta en solidaridad con los jóvenes catalanes encarcelados por su supuesta relación con ETA. La protesta se desarrolló a la Rambla de Canaletes y finalizó en la plaza Sant Jaume, dónde se concentraron durante unos minutos. Participaron 150 personas, según los organizadores. Durante el acto se gritaron consignas de apoyo a los presos y presas políticos catalanes y vascos.
Fuente : Europa Press/El Punt
Par : La Haine – Barcelona