En una demostración de la debilidad del sistema Just In Time, el miércoles 25 de febrero se ha producido una situación kafkiana al haberse parado la producción de la empresa SEAT fruto de un conflicto en un proveedor de Nissan. Los trabajadores de Esteban Ikeda, que están afectados por un cierre concursal (verdadero atentado a los derechos de los trabajadores), sólo han tenido una propuesta de solución por parte de Nissan : la empresa matriz se queda con las máquinas para seguir produciendo «sus» asientos y ofrece a la plantilla una indemnización por despido de 60 días.
Ante esta situación, la totalidad del Comité ha decidido luchar contra la multinacional Johnson Controls. Dicha multinacional tiene otras plantas que montan asientos igualmente pero para otras empresas como SEAT. Es el caso de Eurosit hacia donde se han dirigido a cortar la salida y entrada de camiones como medida de presión para que, tanto Johnson Controls como Nissan (entremado de intereses económicos) den una solución a sus puestos de trabajo. Por supuesto la CGT de Estaban Ikeda luchamos por el mantenimiento de los puestos y rechazamos la solución de los despidos.
La falta de suministros ha llevado a la SEAT a pedir al Comité Intercentros la paralización de la producción. En un momento en que también se vive un ERE en SEAT que afecta a miles de trabajadores. Estas son las consecuencias de un sistema económico sin escrúpulos y sin control que ha permitido unos entramados financieros de intereses que han llevado a la precariedad a millones de personas y que sólo ha servido para que algunos se llenaran los bolsillos.
Ahora, toca la solidaridad y seguir presionando todos para que Nissan mantenga los puestos de trabajo a los 260 compañeros de Esteban Ikeda y que eso resuelva también (paradojas de la vida) la situación de falta de producción de SEAT.
Fuente: Sec. Comunicació CGT Catalunya