La Comunidad Valenciana vivió ayer una jornada absolutamente negra en el terreno de la siniestralidad laboral : dos trabajadores resultaron muertos en sendos accidentes en Sagunto y Calig (Castellón), mientras que otros cuatro resultaron heridos de diversa consideración.

La Comunidad Valenciana vivió ayer una jornada absolutamente negra en el terreno de la siniestralidad laboral : dos trabajadores resultaron muertos en sendos accidentes en Sagunto y Calig (Castellón), mientras que otros cuatro resultaron heridos de diversa consideración.

El primero de los siniestros mortales se produjo en el polígono químico del Port de Sagunt : un joven de 23 años, de nacionalidad peruana, falleció mientras trabajaba en unas perforaciones para la construcción de una subestación eléctrica junto a las instalaciones de la futura central térmica de ciclo combinado. Este suceso hizo que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, suspendiera la visita que tenía prevista a la planta regasificadora de Saggas, para comprobar in situ la evolución de las pruebas con gas, según informa Enric Cuenca .

El segundo accidente mortal se registró en la localidad de Calig (Castellón), cuando un obrero se electrocutó mientras trabajaba con una una grúa y rozó un cable de alta tensión. El fallecido, de 42 años, responde a las siglas de C.G.S.N.

En cuanto a los siniestros que se saldaron sin víctimas mortales, un operario de una de las dos grúas que el pasado jueves instalaron las vigas centrales del puente de la Bega de Cullera, resultó ayer gravemente herido al caer de una altura de tres metros, cuando realizaba las tareas de desmontaje de la maquinaria más pequeña, según informa Maite Nácher . Además, otro trabajador resultó herido de consideración en un cámping de Gandía tras sufrir una caída mientras desempeñaba su oficio. Finalmente, otros dos empleados de una obra que se está realizando en el barrio valenciano de la Malvarrosa también sufrieron lesiones como consecuencia de sendas caídas.


Fuente: diarioinformacion