José Bové, símbolo de la lucha contra la globalización en Francia, y otros activistas contra los cultivos transgénicos fueron detenidos hoy por gendarmes en Solomiac (sur) cuando se disponían a arrasar un campo de Organismos Genéticamente Modificados (OGM), según fuentes policiales.
Los cerca de mil militantes anti-OGM que se habían desplazado para llevar a cabo la iniciativa, anunciada previamente, no pudieron siquiera entrar en el campo, ya que las fuerzas del orden que les esperaban habían bloqueado las entradas.
En vista de que los activistas no se retiraban de la zona, los agentes les dispersaron con gases lacrimógenos, antes de que se produjeran algunos incidentes.
Los enfrentamientos se saldaron con dos heridos y la detención de varios militantes, entre ellos Bové, según las fuentes.
Bové, activo militante contra la agricultura transgénica, ya ha pasado varios meses de prisión por este tipo de actos y el próximo día 16 volverá a ser juzgado por arrancar cultivos de OGM en julio pasado.
El portavoz del sindicato Confederación Campesina, uno de los organizadores del acto, denunció «un despliegue de fuerzas y de violencia desproporcionado en relación a la manifestación».
Agencias