Compañeras y compañeros:
EL Grupo de Trabajo No Estamos Todxs nos envía la siguiente denuncia de Roberto Paciencia Cruz. Sin más por el momento... Equipo de Comunicación de la RvsR
Denuncia Pública de Roberto Paciencia Cruz, preso injustamente en el CERESO No 5 A la opinión pública
A los medios de comunicación Estatal, Nacional , Internacional
A los medios alternativos
A la sociedad Civil, Estatales, Nacionales , Internacionales
A los organismos independientes
A los defensores de los derechos humanos ONGS Preso injustamente Roberto Paciencia Cruz, recluido en el penal No 5 San Cristóbal de las Casas, Chiapas. La injusticia, discriminación, humillaciones es lo que estamos sufriendo en diversas cárceles del país.
Lamentablemente es lo que esta ocurriendo en el CERESO No 5 con el contador Sr Ramos Morales, este funcionario nunca se ha preocupado del bienestar de la población interna, carecemos de nuestros sagrados alimentos, nuestras comidas que nos daban con anterioridad han ido disminuyendo, como pobres presos hemos hablado con el contador, nos dice que lo van a mejorar pero solamente son puras promesas y nunca lo valora su palabra, el nos dice que si nos quejamos en alguna dependencia nos puede ir peor como le paso al compañero Alejandro Diaz Sántiz, que fue trasladado a otro penal solo por decir la verdad. Es por ello, que hago esta denuncia pública, exijo al gobernador Manuel Velasco Coello que tome carta en el asunto mencionado de este empleado, que solamente se ha preocupado por su bienestar personal.
Al mismo tiempo pido a l@s jueces que analicen mi caso, porque no es justo que me juzguen o me sentencien sin razón, no tengo delito que pagar en la cárcel. Por último invito todas las organizaciones independientes, estatales, nacionales e internacionales a seguir reclamando las libertades de todos los pres@s injustamente.
JUSTICIA Y LIBERTAD FRATERNALMENTE Roberto Paciencia Cruz
Reclusorio No 5 San Cristóbal de las Casas, Chiapas a 13 de enero del 2016. ¡CONTRA EL DESPOJO Y LA REPRESIÓN: LA SOLIDARIDAD!
Red Contra la Represión y por la Solidaridad
Correo electrónico: comunicacion@redcontralarepresion.org
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Roberto Paciencia dice que es inocente, como la mayoría de los presos. La diferencia con este tsolsil recluido desde julio pasado en San Cristobal de las Casas, Chiapas, es que forma parte de un complicado grupo al que las debilidades institucionales del país golpea con todas sus fuerzas: es pobre, indígena y acusado por un sistema de justicia turbio y opaco.
Roberto Paciencia dice que es inocente, como la mayoría de los presos. La diferencia con este tsolsil recluido desde julio pasado en San Cristobal de las Casas, Chiapas, es que forma parte de un complicado grupo al que las debilidades institucionales del país golpea con todas sus fuerzas: es pobre, indígena y acusado por un sistema de justicia turbio y opaco.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos cuenta poco más de 8,000; la mitad, concentrados en los estados de Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Puebla y Veracruz, pero también los hay en plena capital mexicana, en Chihuahua, Coahuila, Aguascalientes y Nuevo León.
Están acusados de homicidio, lesiones, daño patrimonial, despojo, violación, estupro, hostigamiento sexual, portación de armas de fuego y delitos contra la salud.
Tzolziles, tzeltales, nahuas, zapotecos, nahuas y mayas que llegaron a las cárceles sin un debido proceso, detenidos sin órdenes de aprehensión, confesos bajo presuntas torturas y sin abogado o perito traductor a su lengua nativa a pesar de que no dominan el español o apenas entienden algunas palabras.
Ese es Paciencia, un chofer de transporte originario de la comunidad de Majopepentic a quien la Policía Estatal Preventiva chiapaneca detuvo en la calle acusado de secuestrar a dos personas el 18 de mayo de 2013.
“Me hicieron firmar por un delito que no cometí”, afirma en una carta pública difundida por la organización civil no gubernamental Sipaz.
