Sidi Bouzid, 50.000 habitantes, capital de una provincia de 450.000 habitantes, en el centro-sur de Túnez. El 70 % de la población se dedica a la agricultura y ganadería. Allí se inmoló el 17 de diciembre el parado Mohamed Bouazizi, hoy convertido en símbolo de la revolución de la dignidad.

En el local de la UGTT nos encontramos con el comité de salvaguardia
de la revolución. Desde el 14 de enero, fecha de la caída de Ben Ali,
distintas organizaciones constituyeron este comité con dos objetivos
claros: defender las conquistas de la revolución y ampliarlas,
desarrollarlas.

Desde el comité de Sidi Bouzid, se impulsó y se participó en las
concentraciones de la Kasba 1 y Kasba 2 que consiguieron derribar al
gobierno Ghanouchi, que representaba la continuidad de Ben Ali y de su
partido, el RCD.

En el local de la UGTT nos encontramos con el comité de salvaguardia
de la revolución. Desde el 14 de enero, fecha de la caída de Ben Ali,
distintas organizaciones constituyeron este comité con dos objetivos
claros: defender las conquistas de la revolución y ampliarlas,
desarrollarlas.

Desde el comité de Sidi Bouzid, se impulsó y se participó en las
concentraciones de la Kasba 1 y Kasba 2 que consiguieron derribar al
gobierno Ghanouchi, que representaba la continuidad de Ben Ali y de su
partido, el RCD.

Se mantiene firme la exigencia de disolución de la policía política
de la dictadura, la publicación de sus documentos secretos y el
descubrimiento de los distintos tipos de policía secreta creados (Se
tiene noticias de que existían hasta 6 tipos de policías, parte de
ellos, totalmente secretos). Y junto a ello, la detención y el juicio de
los responsables de los asesinatos de manifestantes y de la corrupción,
del robo y el destrozo del país.

El gobierno de Béji Caid Sebsi sigue manteniendo la impunidad del
aparato de Ben Ali. Se ha liberado a los presos políticos, se ha
cambiado de gobernadores y de jefes de policía, se ha disuelto el RCD
pero los responsables de crímenes no están en prisión. Muchos
gobernadores son antiguos militantes del RCD y éste se ha camuflado en 5
o 6 partidos que han sido legalizados.

Ninguna confianza en este gobierno. Hasta hoy, ningún cambio
económico que beneficie al pueblo. El paro sigue igual y los símbolos de
la corrupción continúan. La prensa y la TV ha cambiado de lenguaje pero
siguen controladas.

También en Sidi Bouzid, el consejo municipal está disuelto y el
comité de salvaguardia de la revolución ha propuesto las personas para
constituirlo. Pero no se les da presupuesto, se paraliza cualquier
acción. El poder no se ha olvidado del papel de Sidi Bouzid en la
revolución y trata de castigarlos.

Pero en Sidi Bouzid, como en gran parte de Túnez, lo más importante son los procesos de autoorganización popular.

Ya se ha creado un comité preparatoria para la creación de un
sindicato de agricultores que defienda sus intereses de manera autónoma,
los diplomad@s en paro también se han organizado y mantienen una
acampada reivindicativa con una tienda en el centro de la ciudad y se
prepara la Kasba 3 para seguir presionando por las reivindicaciones no
conquistadas y expresando el rechazo al actual gobierno.

Y sobre todo, el ambiente de debate, de discusión, de aprender. Saben
que falta formación sindical, que necesitan crear una nueva cultura,
una nueva mentalidad que responda a las necesidades del proceso
revolucionario. No tienen miedo del islamismo radical pues piensan que
el Islam de Túnez siempre ha sido tolerante y respetuoso de la
pluralidad.

Redeyef: la cuenca minera de Gafsa, antecedente próximo de la revolución

La espontaneidad del proceso revolucionario en Túnez es más aparente
que real. Son muchos años de siembra, de procesos de acumulación de
experiencias y de luchas, de represiones ocultas pero que van creando
raíces profundas que, en determinadas circunstancias, brotan y salen a
la luz.

Este es el caso de Redeyef que ya vivió un levantamiento popular en
el 2008, que fue brutalmente reprimido pero que fue el anuncio del
actual proceso revolucionario.

En el sencillo local de la UGTT encontramos los grandes sillones del
local del partido de Ben Ali que han sido confiscados por el pueblo.
Antiguos mineros presos con el levantamiento contra la reestructuración
de las minas y el paro (En esta zona, el único trabajo es la CPG, la
compañía de fosfatos de Gafsa, y una agricultura de subsistencia en una
tierra muy árida y pobre) nos acogen, junto con el comité local de los
diplomad@s en paro y el primer “blogueur” de la revolución

9 personas gestionan la vida del pueblo, 7 hombres y 2 mujeres. Es
provisional y voluntario y la lista se ha enviado al gobernador de la
provincia.

Los diplomad@s en paro nos hablan de su lucha desde el 2004 en que
comienzan a organizarse a pesar de la represión. Hay unos 3.000
diplomad@s en paro en la provincia de Gafsa. Se preparan para presionar
al gobierno, organizándose en todo Túnez. El comité está compuesto por 4
hombres y 4 mujeres.

La mujer ha ganado en la calle su papel fundamental en la lucha. Fue
en 2008 cuando una manifestación casi exclusivamente de mujeres, algunas
con sus hijos en brazos, salió a la calle para expresar su solidaridad
con los mineros de la cuenca de Gafsa. La brutal represión policial que
sufrieron provocó las revueltas de Gafsa que duraron varios meses.

El comité de salvaguardia de la revolución ha presentado un dossier
con todo lo ocurrido en el 2008, con denuncias concretas, nombres y
apellidos, de los responsables de las muertes y torturas. No olvidan
este dossier al que se une, en otro dossier, el de la represión de
diciembre de 2010 y de enero de 2011.

En Redeyef se sembró la revolución con muertos y presos. Hoy se empiezan a recoger los frutos.

M.H.

Mouatamid

Equipo de trabajo para el norte de África de la S. de RR. II. de la CGT

Crónicas desde Túnez (1)
“La calle lo tiene claro: En Túnez la revolución acaba de empezar”

Crónica desde Túnez (2)
“ En el corazón de Túnez, Thala: la comisaría ocupada”

Próxima crónica (4):
“La UGTT: entre la traición y la lucha. Otras opciones: la CGTT”

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Fuente: cgtnortedeafica - RR.II. CGT