Ecologistas en Acción denuncia, una vez más, las nefastas consecuencias sociales y ambientales de las maniobras militares en campos de tiro. Entre la segunda semana de octubre y la segunda semana de diciembre el ejemplo palmario de estos impactos ha sido el campo de tiro de El Teleno en León.
De la segunda semana de octubre hasta las segunda semana diciembre de 2010 se han realizado maniobras con fuego real en el campo de tiro de “El Teleno” con fuertes impactos socioambientales que ha denunciado Ecologistas en Acción ante el Ministerio de Defensa y el de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino.
El ruido y las vibraciones han sido una de las contaminaciones ambientales más claras, sobrepasando ampliamente los límites existentes en la Ley del Ruido de Castilla y León de 4 de julio de 2009.
Durante las prácticas de tiro, los obuses han pasado por encima de infraestructuras y lugares de trabajo. Incluso se han registrado impactos en las carreteras de la comarca.
Las vías locales han sido utilizadas masivamente por los vehículos militares, lo que ha impedido el normal desplazamiento de l@s vecin@s. Las altas velocidades de los vehículos militares en estas carreteras comarcales ha sido un factor más de riesgo. Además se han interceptado vehículos privados por parte de personal militar armado, sin que estos tengan competencias para hacerlo.
El uso masivo de los caminos de concentración por parte de los vehículos militares en días de fuertes lluvias ha provocado rodadas que los han convertido en inhábiles, derrochando el presupuesto para arreglos que ese Ministerio de Defensa había realizado.
Además se ha producido la ocupación militar de la zona en fines de semana, aunque sin fuego real, lo que supone violar los acuerdos existentes sobre la no ocupación en fines de semana para salvaguardar el turismo rural, una de las bases de la economía local. Otra irregularidad más ha sido la ocupación de lugares no autorizados con ingenios bélicos.
Durante las prácticas se ha producido la emigración de diferentes especies animales que viven en el capo de tiro. Del mismo modo, se ha producido un fuerte impacto sobre la vegetación, con destrucción de la cubierta vegetal y rotura de árboles en las zonas de caídas, así como la desaparición de la cubierta vegetal en los lugares de campamentos.
Estas maniobras, junto con las reiterados impactos de 28 años de actividad militar, afectan especialmente a los restos arqueológicos de la minería romana presentes en la zona.
Por todo ello, Ecologistas en Acción pide :