CGT y UGT, que acusan al Ayuntamiento de colaborar con las empresas para «machacar a los trabajadores», recurrirán unos despidos que tildan de «improcedentes» y recuerdan que las movilizaciones se prolongarán hasta lograr «un convenio digno para el conjunto de los operarios»
chiclana. Dos de los trabajadores del servicio de limpieza viaria que habían sido expedientados por romper las bolsas de basura y, según se les acusa, esparcir su contenido durante las jornadas de huelga recibieron ayer sus cartas de despido.
De este modo, ya son tres de los cuatro operarios que fueron expedientados (el primero pertenecía a la empresa Orto) los que han recibido el despedido de sus respectivas empresas, circunstancia que incrementó, más si cabe, la indignación entre los trabajadores y entre sus representantes sindicales, que ayer, en compañía de miembros de la plantilla de la recogida de basura (Urbaser), volvieron a manifestarse frente al Ayuntamiento.
«No cabe la menor duda», precisó José Porras, representante de UGT, «que se trata de medidas improcedentes que vamos a recurrir y que, lo más lamentable, se producen con el consentimiento y la colaboración (cámaras) del propio Ayuntamiento y, muy en especial, de su máximo representante, José María Román, que no está ejerciendo la responsabilidad que se le presume».
«Lejos de, tal y como proclama el propio Zapatero, propiciar el diálogo y ejercer su papel de alcalde», añadió, «José María Román ha apostado por alinearse con las empresas concesionarias, una actitud que rechazamos y por la que vamos a cursar una comunicación a todos los organismos provinciales representativos de la Unión General de Trabajadores para que rompan todas las relaciones institucionales».
«Es evidente», prosiguió, «que con estos despidos se consuma una venganza por lo ocurrido en Feria de San Antonio, fundamentalmente durante la jornada inaugural y que, salvo que se dé marcha atrás sobre los mismos y se propicie una negociación que desemboque en un convenio digno para el conjunto de los trabajadores, la situación empeorará y, probablemente, las empresas acabarán llevando a los operarios a una huelga salvaje».
En el mismo sentido se expresó Francisco Mena, representante de CGT, que recordó que «lo único que están pidiendo los trabajadores es que se cumpla la palabra dada por parte del Ayuntamiento, de su alcalde».
El representante sindical, que lamentó que el Consistorio hubiese puesto a disposición de las empresas las imágenes de las cámaras para proceder a expedientar a los trabajadores, no quiso entrar a valorar las acusaciones que el delegado municipal de Vías y Obras realizó sobre él y Santiago Pozas, acusándolos de querer hacer política, si bien apuntó que, «seguramente, yo también fui el que mató a Kennedy y el responsable de lo que ocurrió el 11-S».
Así las cosas, los representantes de la Unión General de Trabajadores y de la Confederación General del Trabajo aseguran que mantendrán las movilizaciones hasta que no se de marcha atrás en los despidos y se camine en pro de un convenio digno y justo.
Fuente: diariodecadiz