Hoy día 12 de septiembre comienza oficialmente el curso escolar 2011-12 en toda Andalucía. Un día en el que miles de niños y niñas de 3 años irán por primera vez a clase. Su primer día de colegio. Día importante donde los haya y que marcará el inicio de una larga etapa educativa. Las más preocupadas, las madres aunque algún padre, que por aquello de la crisis, tendrá tiempo para llevar a su retoño al colegio, pero fundamentalmente serán las madres.

Nutritivas, cuidadoras genéticas que aman a su prole con una especial intensidad y que desean que la alegría nunca abandone el corazón de sus hijas e hijos. Saben que el entorno del grupo clase está lleno de otras criaturas que interactuarán con su retoño. Confía a ciegas en el buen hacer de la profesora (solo un 18% de todo el magisterio que se dedica a la educación infantil son varones) y a ella le encomienda ¡lo que más quiere!

Nutritivas, cuidadoras genéticas que aman a su prole con una especial intensidad y que desean que la alegría nunca abandone el corazón de sus hijas e hijos. Saben que el entorno del grupo clase está lleno de otras criaturas que interactuarán con su retoño. Confía a ciegas en el buen hacer de la profesora (solo un 18% de todo el magisterio que se dedica a la educación infantil son varones) y a ella le encomienda ¡lo que más quiere!

Este día será un rato el que los deje en el colegio, pero ese rato para ella será muy largo. Aunque ya lo ha llevado a la guardería, ella sabe que no es igual y que en este nuevo escenario es muy importante que las primeras impresiones sean positivas. Al día siguiente se quedará toda la jornada escolar si se adapta bien a sus compañeras y compañeros, al amplio espacio del aula cargado de “rincones” para el juego, para la indagación, para la experiencia… A pesar de su preocupación está tranquila y confiada porque sabe, está segura, que la profesora se dedicará plenamente y le ayudará en su tarea educativa como madre. El profesorado, una vez estén los niños y las niñas en el colegio, olvidará la indignación que sienten por recibir un trato indigno de quienes dirigen la administración educativa. Ante sus alumnas y alumnos les sale el magisterio que cada docente porta y se aplica a una de las más nobles profesiones que existen.

Mañana también regresan aquellas “golondrinas bullangueras” que están deseando juntarse con sus amigas y amigos, para no parar de hablar o para escuchar las mil y una historias acaecidas, a unas y a otros, este largo, largo, larguísimo, verano. Otros llevan sus mochilas cargadas de los deberes que debieron hacer este verano y del objeto favorito para enseñar a sus amigos y amigas. En su cabeza suena el nombre del nuevo profesor o profesora, con fama de exigente… o bien la amplia sonrisa de su maestra o maestro del curso anterior que sigue dándole clase.

Una mirada observadora permitirá distinguir algunos niños y niñas que no llegan con buen humor y que este fenómeno aumenta en función de la mayor edad de los mismos. Es que la Escuela produce un efecto no deseado que debe preocuparnos a madres, padres y profesorado, porque cuando se consolida la “hartura de escuela”, ya es muy tarde para modificarla. Mucho se dice sobre la motivación con que los humanos hacemos nuestro trabajo y este aspecto en Educación es fundamental, porque sólo aprende uno, el que quiere. Aquel que no se aplica a aprender no lo hace por más que pretendamos los adultos meterle el conocimiento. Pensemos por un momento que este curso con 175 días lectivos supone a estos niños y niñas estar dentro de un centro escolar la nada despreciable cantidad de 875 horas de clases, más algunas de actividades complementarias y extraescolares y que además en su casa llevará tareas escolares que añadirán tiempo escolar. Si ese tiempo no es vivido con alegría, con la ilusión de saciar la curiosidad que en los infantes es enorme, malo. ¡Muy malo!. Por ello hagamos lo necesario para que descubran un mundo nuevo para ellos y para nosotros, ya que siempre debemos sorprendernos de la maravilla del aprendizaje. Por tos esto y otras muchas razones ¡Hoy debe ser un gran día!, para todos.

Rafael Fenoy Rico, Secretario de Comunicación CGT Enseñanza


Fuente: Rafael Fenoy Rico