LLAMAMIENTO DE LA UNION SINDICAL OBRERA A apoyar la huelga contra la negativa de la direccion a negociar y las actuaciones para privatizar ECOPETROL
En Noviembre de 2002, la USO presentó el pliego de peticiones cuyo eje central es la defensa y fortalecimiento de ECOPETROL. El mismo día gobierno y administración radicaron un contrapliego dirigido a arrasar la Convención Colectiva de Trabajo y a negar la discusión de la política petrolera y la situación de la empresa.
Durante cuatro meses de discusiones la administración se resistió a negociar el pliego y pretendió en su lugar imponer el contrapliego, por lo cual el proceso terminó sin ningún resultado, porque su objetivo era llevar el conflicto laboral a un Tribunal de Arbitramento, como efectivamente ocurrió, con la complicidad del mal llamado Ministerio de la Protección Social.
El Tribunal funcionó sin la representación de los trabajadores y produjo, como era de esperarse, un Laudo que arrasa por completo la Convención Colectiva. El Laudo fue impugnado por la USO ante la Corte Suprema de Justicia, la cual falló confirmando el mismo y ordenándole al Tribunal que en un plazo perentorio se pronuncie sobre los artículos del pliego y la denuncia patronal en los cuales no lo había hecho.
Todos los esfuerzos del sindicato para lograr una solución negociada durante los 17 meses de conflicto fueron infructuosos, porque Álvaro Uribe Vélez e Isaac Yanovich tienen la decisión de acabar con los derechos de los trabajadores, liquidar la organización sindical y quedar con las manos libres para imponer una política petrolera antinacional. No valió la mediación de sectores democráticos dentro del Parlamento y la iglesia católica que hicieron esfuerzos hasta último momento.
En desarrollo de esta política, el gobierno expidió el decreto 1760 que escindió la empresa y le cambió la naturaleza a ECOPETROL convirtiéndola en una sociedad por acciones. Similares medidas se aplicaron para TELECOM y el Instituto de Seguros Sociales. En ambos casos los trabajadores perdieron todos sus derechos y las entidades están en proceso final de liquidación y privatización.
Simultáneamente, el gobierno ha implementado nefastas determinaciones en materia de política petrolera, conducentes a la desnacionalización de la industria. Decidió prorrogar los contratos de asociación del gas de la Guajira, del crudo de Sabana de Torres y Caño Limón, beneficiando a las multinacionales CHEVRON TEXACO y OXY ; dispuso el regreso al contrato de ’’Concesión Moderna’’ que concede el 100% de la producción a las transnacionales ; entregó los campos de producción directos mediante contratos de crudo incremental y alianzas estratégicas a la OXY, SCHULEMBERGER y BP, entre otras ; así mismo anuncia la venta de la refinería de Cartagena y abandona deliberadamente el mantenimiento del Complejo de Barrancabermeja con el fin de facilitar su desmonte y posterior privatización.
La realidad es que se está liquidando y privatizando a ECOPETROL obedeciendo los intereses de los Estados Unidos, que ha resuelto hacerse al control del petróleo en el mundo, como lo demuestran las intervenciones en Afganistán, Irak, Venezuela, Bolivia, México, con distintos métodos, pero con el objetivo central de asegurar su aprovisionamiento de crudo.
ECOPETROL aportó el 29% del total de los ingresos corrientes de la nación, sus ventas totales ascendieron a 12.5 billones, obtuvo utilidades por 1,3 billones y le transfirió al fisco nacional más de 5 billones, reafirmándose como la empresa más importante del país. Además incide de manera determinante en la economía de varias regiones. Por ejemplo en Barrancabermeja, los aportes al municipio representan el 95% del presupuesto y en el Departamento del Meta el aporte es del 60%.
Estos hechos denotan la magnitud del atentado a los intereses nacionales y deben llamar la atención del pueblo colombiano sobre la importancia de defender a ECOPETROL como patrimonio nacional y palanca del desarrollo económico y social. Conscientes de esta realidad, los trabajadores de ECOPETROL invitamos a defender los siguientes objetivos de nuestra justa lucha :
1.- Política petrolera al servicio de la nación, para lo cual se debe derogar el decreto 1760 y abolir la AGENCIA NACIONAL DE HIDROCARBUROS como instrumento fundamental de la entrega del recurso petrolero ; desistir de la aplicación de los regresivos contratos de concesión moderna con los que se entregará el petróleo ; así mismo negar la prórroga de los actuales contratos de asociación vigentes haciendo efectivas las reversiones al Estado. Lo anterior sobre la base de fortalecer financiera y administrativamente a ECOPETROL.
2.- Respeto al derecho a la negociación colectiva, por lo cual rechazamos el Laudo Arbitral y exigimos la negociación directa para resolver nuestro conflicto laboral, el respeto de la Convención y la estabilidad laboral de todos los trabajadores de la empresa.
3.- Defensa de las libertades sindicales, que debe expresarse en el reintegro de nuestros compañeros despedidos, levantamiento de las sanciones, respeto al libre ejercicio de la actividad sindical y el derecho de asociación y la cesación de los procesos penales.
Por defender estos objetivos, la USO se ha ganado en su contra una feroz campaña de estigmatización por el gobierno y la administración, consistente en 13 despedidos, 75 días de veto con desalojo de trabajadores y dirigentes sindicales, campañas de chantaje y amedrantamiento, 1000 trabajadores citados a procesos disciplinarios, 43 compañeros sometidos al encierro y aislamiento de las áreas trabajo, trámite de una querella para levantarle la personería jurídica al sindicato, activación de procesos penales y detenciones arbitrarias de dirigentes sindicales, como ocurrió en el caso del compañero Hernando Hernández, entre otros comportamientos antisindicales.
En los últimos días la empresa ha procedido a imponer el veto a dirigentes sindicales y a desalojar a los trabajadores en las refinerías de Barrancabermeja y Cartagena, medida que anuncia extender a los demás centros de producción. Mientras amenaza con ilegalizar la huelga de los trabajadores, en la práctica está paralizando la empresa con estas medidas, justificadas bajo supuestos sabotajes como una justificación de sus propósitos represivos.
Así las cosas, el gobierno de Álvaro Uribe y la administración de Ecopetrol, han obligado a los trabajadores a tomar la determinación de iniciar un MOVIMIENTO HUELGUISTICO por la defensa de Ecopetrol, por los derechos de los trabajadores y por la existencia de la USO. Concordante con este hecho el personal directivo, en actitud valerosa, se declaró en Huelga de hambre en respaldo a los justos reclamos de los trabajadores.
En consecuencia, llamamos al movimiento sindical nacional e internacional, a las organizaciones sociales y populares, a las fuerzas políticas democráticas y en general a todos los colombianos a quienes les preocupe la suerte de la nación a que acompañen decididamente esta lucha con la más amplia solidaridad.
JUNTA DIRECTIVA NACIONAL
UNION SINDICAL OBRERA DE LA INDUSTRIA DEL PETROLEO
Barrancabermeja, 22 de abril de 2004
Par : Miguel