Diversos colectivos y organizaciones sociales se manifestarán el próximo sábado en Madrid para denunciar la «sistemática violación de derechos humanos» que se vive en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE), «los guantánamos europeos».
En una rueda de prensa celebrada a las puertas del CIE de Aluche (Madrid), la portavoz de Ferrocarril Clandestino, una de las organizaciones convocantes, Inés Llinas, explicó que la marcha protestará contra las «continuas agresiones y humillaciones psicológicas» que sufren los inmigrantes en estas dependencias.
«Los extranjeros viven hacinados, en condiciones de insalubridad, y carecen de una tutela judicial efectiva. Se violan sistemáticamente los derechos humanos con total impunidad», sentenció.
Además, indicó que estos lugares, que son dependencias policiales en las que se retiene por un máximo de 40 días a los extranjeros irregulares hasta su expulsión de España, «en la práctica funcionan como si fueran cárceles», pero con la salvedad de que los internos «no son delincuentes sino inmigrantes en situación administrativa irregular».
Ante esta situación, diversos colectivos de inmigrantes han convocado una marcha para el próximo sábado, que partirá a las 18.00 horas de la boca de metro de la estación de Aluche, en la que solicitarán que se cierren la decena de centros de este tipo que existe en España, con una capacidad total de unas 2.000 plazas.
Asimismo, la portavoz de Ferrocarril Clandestino apuntó que unos 30 de los 80 hombres que el lunes pasado iniciaron una huelga de hambre «mantienen su decisión de no comer para denunciar lo que están viviendo». «Ahora bajan al comedor, porque les han dicho que le pegarán una paliza al que no lo haga, pero ellos siguen sin comer nada».
Estos colectivos aseguran que han comunicado al Ministerio del Interior la situación que se vive en los CIE, pero no han recibido respuesta.
TESTIMONIOS DE FAMILIARES
Por su parte, María Teresa Rozo, pareja de un colombiano de 61 años que lleva ocho días en este centro, aseguró que a los internos «les llaman inmigrantes de mierda», no les dejan mantener ninguna conversación privada con personas del exterior, y «les dicen que no tienen nada que hacer» en España.
Según su versión, a su compañero sentimental, que lleva más de dos años en España, no le administran «los medicamentos que necesita para curar su enfermedad del estómago». «A las personas que viven en estos centros se les ha detenido sólo por no tener papeles, pero se les trata como si fueran delincuentes», aseveró.
Mientras, Rommel S., aseguró que su tío, de origen ecuatoriano y que también se encuentra en estas dependencias, «está siendo maltratado». «Que estén allí dentro está provocando que muchas familias se rompan», manifestó.
A su juicio, el presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, es un «mentiroso» porque «durante la campaña electoral decía que los inmigrantes lo eran todo para él, pero ayer ya dijo en el Congreso de los Diputados que hará todo lo posible para expulsar a los que estén en situación irregular».
Fuente: Europa Press. Foto : Chema V.
