SINALTRAINAL (Sindicato de Trabajadores de la Alimentación)
teme un recrudecimiento de la política violenta de la transnacional Coca-Cola en Colombia.
Reproducimos el último comunicado de los compañeros y compañeras e insistimos en el mantenimiento del boicot a Coca-Cola lanzado, en su momento, por CGT.
El pasado 18 de septiembre de 2007, SINALTRAINAL presentó queja ante el Director General de la Oficina Internacional del Trabajo, contra el Gobierno de Colombia por inobservancia del Convenio sobre Libertad sindical y protección del derecho de sindicalización, 1948 (núm. 87) y el Convenio sobre el derecho de sindicalización y de negociación colectiva, 1949 (núm. 98).
Colombia, que es Miembro de la Organización Internacional del Trabajo desde 1919, ha ratificado desde 1933, 60 convenios de dicho Organismo, de los cuales 54 se encuentran en vigor, amén de la obligación de cumplimiento de la Constitución de la Organización, siendo parte en los Convenios núms. 87, 98 y 111, desde su ratificación en 1976. Además la Conferencia Internacional del Trabajo, a través de la Declaración de la OIT relativa a los principios y derechos fundamentales en el trabajo y su seguimiento, recuerda que “al incorporarse libremente a la OIT, todos los Miembros, (entre ellos Colombia) han aceptado los principios y derechos enunciados en su Constitución y en la Declaración de Filadelfia, y se han comprometido a esforzarse por lograr los objetivos generales de la Organización en toda la medida de sus posibilidades y atendiendo a sus condiciones específicas, que esos principios y derechos han sido expresados y desarrollados en forma de derechos y obligaciones específicos en convenios que han sido reconocidos como fundamentales dentro y fuera de la Organización”.
Adicionalmente, Declara que “todos los Miembros, aun cuando no hayan ratificado los convenios aludidos, tienen un compromiso que se deriva de su mera pertenencia a la Organización de respetar, promover y hacer realidad, de buena fe y de conformidad con la Constitución, los principios relativos a los derechos fundamentales que son objeto de esos convenios, es decir :
a) la libertad de asociación y la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho de negociación colectiva ;
b) la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio ;
c) la abolición efectiva del trabajo infantil ; y
d) la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación.
Lamentablemente y a pesar del esfuerzo constante de los trabajadores por la reivindicación de sus derechos vulnerados a lo largo de estos duros años, en los cuales la violación a las libertades sindicales ha sido la regla imperante en el país, aun se siguen cometiendo crímenes de lesa humanidad y violaciones masivas a los derechos de los sindicalistas colombianos con ocasión a su pertenencia a las organizaciones. Las agrupaciones al margen de la ley, en especial los grupos paramilitares, son los principales autores de las persecuciones y victimización de las organizaciones sindicales, atentando en gran medida contra la vida de muchos sindicalistas, pero también generando constantes amenazas, secuestros, seguimientos, atentados, y demás intimidaciones que ocasionan el no ejercicio de la actividad sindical. Algunas de estas actividades ilegales se realizan bajo la aquiescencia de empresas transnacionales, para quienes la lucha por la reivindicación de los derechos de los trabajadores constituye una amenaza para el incremento de sus utilidades, y por ello recurren al patrocinio de estos grupos criminales para provocar así el exterminio total de las organizaciones sindicales.
El país ha presenciado como ha sido el actuar criminal de varias empresas transnacionales, frente a las que existen serios indicios de su autoría intelectual en varios de los homicidios cometidos contra sindicalistas y del aniquilamiento de muchas organizaciones sindicales. Una de dichas empresas es Coca Cola, que enfrenta varias denuncias en Estados Unidos por auspiciar la persecución en contra de la asociación sindical SINALTRAINAL o como se acaba de constatar sobre la Chiquita Brands condena por las autoridades de los Estados Unidos a pagar 25 millones de dólares.
En Colombia, varios de los hechos de persecución por parte de grupos paramilitares han sido cometidos contra familiares cercanos a los trabajadores de la empresa Coca Cola. El terror creado por estos grupos en las plantas, ciudades y regiones, se ha incrementado precisamente en momentos en que las relaciones obrero – patronales son tensas debido a los conflictos laborales. La respuesta de los grupos paramilitares, ha conducido a que los trabajadores pierdan sus dinámicas en defensa de los derechos adquiridos a través de largas jornadas de lucha por mejores condiciones de trabajo y de vida.
Por otra parte, y es el objeto central de la presente comunicación, tanto la empresa Coca Cola, como autoridades estatales, han implementado diversas medidas internas para lograr la desvinculación de trabajadores sindicales, victimizacion de los mismos, y la deslegitimación del ejercicio de los derechos sindicales, y finalmente la destrucción de SINALTRAINAL al interior de la empresa.
La presentación de la queja, hace parte de los distintos escenarios e instrumentos de denuncia, busqueda de justicia, verdad, reparación integral y mitigación del dolor de las vístimas, que un importante numero de organizaciones sociales y defensoras de derechos humanos venimos implementando contra la política del estado colombiano, las empresas transnacionales y los monopolios nacionales ; quienes a través del terror continuan generando hambre, miseria y destrucción de las comunidades y sus organizaciones sociales, a fin de lograr la estracción indebida de los recursos naturales y la explotación y precarización de la población colombiana. Invocamos el fortalecimiento de la solidaridad nacional e internacional ante un posible reforzamiento de la política violenta de la transnacional.
Ver texto completo de la queja en la www.sinaltrainal.org
Colombia, septiembre 18 de 2007
Dirección Nacional de SINALTRAINAL
Fuente: Sindicato de Enseñanza. CGT Zaragoza