En la mañana de hoy, cientos de personas, convocadas por CGT, se han concentrado frente a la sede de Telefónica en el Distrito C por la readmisión de los cinco despedidos en esta empresa y la retirada de las sanciones a otros cuatro trabajadores.
La concentración ha tenido lugar entre las diez y media y las doce y media. En el transcurso de la mism, los concentrados han coreado las ya clásicas consignas «Despedidos, readmisión» y «obreros despedidos, patrón colgado».
La celebración de este acto por los despedidos en ese lugar no es gratuita. Precisamente frente al Edificio Norte del Distrito C tenía lugar el 26 de junio pasado, en el marco de las movilizaciones contra el convenio finalmente adoptado que ha supuesto un notable avance en la precarización del empleo en la empresa, una multitudinaria concentración en la que sucedieron (o más bien no sucedieron) los hechos en los que se ha basado Telefónica para despedir a estos cinco trabajadores.
Durante la fase final de la negociación del convenio se convocaron varias huelgas con alto seguimiento en Madrid, realizándose concentraciones de trabajadores en la sede principal de la empresa situada en “Las Tablas”. En la ultima concentración antes de la firma del convenio, en la que participaron más de 2.000 personas, una representación y los componentes del comité de huelga intentaron ejercer su derecho de entrada a los edificios con la idea de entregar un comunicado a los sindicatos que finalmente firmaron el convenio, explicando los problemas del mismo y pidiendo que no lo firmaran.
Cuando intentaron entrar, un gran número de vigilantes mandatados por la empresa, les negaron la entrada con contundencia, hecho que provocó una gran protesta por parte de los trabajadores allí concentrados. Algunos de los sancionados intentaron calmar a los trabajadores negociando con el jefe de seguridad la entrada de 4 personas (una por sindicato). Varias semanas después de esta concentración, Telefónica comunicaba los 9 expedientes, que finalmente se han confirmado en 5 despidos y 4 sanciones de 45 días sin empleo y sueldo, acusando a los que intentaron calmar la situación de incitadores.
Desde la CGT entendemos que ésta es la respuesta represiva de la dirección de la empresa por realizar protestas contra la firma del convenio y anunciar su impugnación ante los tribunales en un intento de hipotecar a los sindicatos que, como CGT, se han negado firmar el mismo por ser discriminatorio hacia la nuevas contrataciones que cobrarán menos salario, realizando el mismo trabajo. Todo ello en una empresa líder del sector con grandísimos beneficios en los últimos años.
CGT ha iniciado una campaña por la readmisión de los cinco trabajadores y la retirada de las sanciones a los otros cuatro. El de hoy ha sido el primer acto de esta campaña, que prevemos larga y que estamos dispuestos a mantener hasta el final, que no puede ser otro que la readmisión.
Fuente: Roberto Blanco. Fotos : David Fernández.