El mes de septiembre ya se ha hecho notar en la unidad de Urgencias del Hospital del SAS de Jerez. Si durante el verano la afluencia de pacientes ha sido la esperada y, en general, las diversas fuentes coinciden en afirmar que se ha tratado de un verano ciertamente tranquilo, la llegada de los veraneantes y el preludio de un otoño lleno de actividad ha dado lugar a otra nueva jornada de colapso en el centro sanitario. Así lo asegura la organización sindical CGT, que ha confirmado a este medio las esperas a las que se han visto sometidos varios usuarios de urgencias.
“Ayer a las diez de la mañana había catorce personas esperando camas desde el día anterior, y nos consta que a las seis de la tarde aún no habían liberado camas, cuyos pacientes estaban dados de alta desde por la mañana”. Una saturación motivada, de esta forma, por un problema que no deja de ser burocrático, como han explicado estas fuentes, que señalan al servicio de ambulancias como una de las claves de esta supuesta falta de efectividad del servicio.
“La contratación de personal de ambulancia es escasa, hay unas 23 ó 26 ambulancias contratadas, y algo que sería importante es tener una de ellas de forma constante en la unidad de Urgencias para los traslados”. Una circunstancia por la que algunos pacientes han de esperar horas para ser trasladados, lo que dificulta la liberación de las camas, como una ciudadana que se vio hace varios días obligada a aguardar tres horas a una ambulancia, a pesar de que “habíamos avisado al servicio cuatro veces”.
a la espera de familiares
A esta circunstancia se unen las dificultades derivadas del papeleo, que conlleva que sean muchos los pacientes que, a pesar de encontrarse de alta, el informe requerido no haya sido aún tramitado, lo que retarda en ocasiones considerablemente el proceso. Una tercera razón que argumenta la CGT parte de los familiares de los propios usuarios, que según el sindicato a veces tardan horas en recoger a los pacientes, lo que impide que abandonen las habitaciones y, por tanto, se puedan adecuar éstas a otras personas que las esperen con anterioridad.
Para evitar estas molestias, la organización propone la creación de una sala de prealtas, destinada a aquellos usuarios que, aunque hayan sido dados de alta, no puedan abandonar aún el hospital por alguna de las diversas cuestiones anteriormente expuestas. “Contar con una sala de prealtas sería lo ideal, para que esperasen los pacientes allí tanto a familiares como a ambulancias. Eso haría que las camas estuvieran inmediatamente disponibles”.
Pero como todo no iban a ser malas noticias, la CGT también se felicita por la reciente apertura del hospital de día oncológico pediátrico, inaugurado el pasado 1 de septiembre. Con estas instalaciones se contribuirá a dotar de mayor calidad este servicio, al incorporar otra enfermera más a disposición de los pequeños, unas atenciones que se complementarán con la apertura de una consulta durante la tarde.
Fuente: almudena doña/Publicaciones del Sur, S.A.
