El pasado martes, los dos docentes de Educación Física acusados del fallecimiento de un alumno en 2017 fueron condenados a sendas multas de 3600 euros y al pago de las costas, que ascienden a 40000 euros.

Lamentamos profundamente que se responsabilice de un accidente a dos personas que estaban realizando su trabajo. La sentencia supone un ataque frontal a todo el colectivo docente y viene a confirmar nuestra desprotección ante situaciones que pueden darse cuando estamos con el alumnado, como empujones en los pasillos, caídas en el patio de recreo o balonazos.

Lamentamos profundamente que se responsabilice de un accidente a dos personas que estaban realizando su trabajo. La sentencia supone un ataque frontal a todo el colectivo docente y viene a confirmar nuestra desprotección ante situaciones que pueden darse cuando estamos con el alumnado, como empujones en los pasillos, caídas en el patio de recreo o balonazos.

La organización de actividades extraescolares y complementarias conlleva un gran esfuerzo por parte del profesorado participante. Las extraescolares, además, son fuera del horario lectivo, pero estas horas extra no son remuneradas. Es decir, son horas (incluso días en el caso de los viajes) de trabajo intenso y alta responsabilidad que regalamos a la Administración para que nuestro alumnado aprenda fuera del aula, para que el grupo se cohesione, para reforzar lazos interpersonales y para que lo pase bien.

Sin embargo, con sentencias como esta y teniendo en cuenta que no tenemos la obligación de realizarlas, es lógico que muchas compañeras y compañeros estén ya manifestando que en lo sucesivo se negarán a participar en ellas.

Desde FASE CGT hacemos un llamamiento a toda la afiliación, al resto de sindicatos de CGT y a la sociedad en su conjunto para apoyar a los dos compañeros a través de las concentraciones organizadas en los centros el 23 de junio y la recaudación de fondos para financiar multas, costas y recursos.


Fuente: CGT-FASE