Tan sólo que serán 600. Ese es, de momento, el único dato claro que admiten conocer los representantes de las secciones sindicales de GM España en la planta de Figueruelas (CGT, CCOO, OSTA, UGT y Acumagme). El resto de cuestiones como el cuándo y el cómo deberán esperar a que las negociaciones se trasladen a cada una de las plantas afectadas por el plan de saneamiento, presentado el jueves por GM Europa.
Precisamente, a primera hora del jueves fue citada la Comisión Permanente —con presencia de miembros de las secciones sindicales— por la dirección de GM España para comunicar los 600 despidos en Figueruelas. Desde entonces, la tensa espera está siendo la protagonista.
El representante de CGT, Alfonso Tierra, lamenta que al final tengan que ser los trabajadores los que «paguen un problema de gestión empresarial», pese a los «esfuerzos de flexibilidad y de recorte de derechos sufridos».
El miembro de CCOO Antonio Carvajal confía en que «el marco de la negociación del convenio siga vigente» y apuesta por «despejar las dudas de si en estos momentos nos enfrentamos a un problema estructural o coyuntural».
Una cuestión que para José López, de OSTA, está clara : «Se trata de un problema estructural, porque llevamos cinco años con problemas», por lo que «si no queremos llegar a situaciones peores hay que solucionar esto por la vía de la negociación», apunta. Lo que sí es un denominador común entre todos es que el objetivo es que «nadie salga contra su propia voluntad y que no haya despidos forzosos». Sobrevuela la hipótesis de las prejubilaciones, de las bajas incentivadas… Sin embargo, nadie se pronuncia de forma clara sobre el cómo, a la espera de conocer la postura de la empresa.
Lo que parece claro, según señalan desde la sección sindical de UGT, es que la negociación será «complicada», porque Figueruelas se enfrenta a algo nuevo y desconocido hasta ahora.