Seguimos recopilando malas noticias sobre el ferrocarril en Castilla y
León, del abandono de la línea directa Madrid-Burgos que pasa por Aranda
de Duero, pasamos a la merma de viajeros en la zona de Valladolid,
perdidos 233.000 en 5 años, tónica que se da en el resto de la Región,
como no puede ser de otra manera, con esta política de rentabilidad
económica y no social, que se materializa en el cierre de estaciones y en
trenes bajos mínimos que hacen inviable su uso.
Las frecuencias no existen, dejando zonas horarias del día muy amplias sin
cubrir, por lo que los posibles usuarios diarios optan por otros medios de
transporte.
Desde las 7 de la mañana a las 23h.
En 16 horas, entre Palencia y Valladolid hay 7 trenes de ida y 7 de vuelta
que atiendan todas las estaciones, entre Medina del Campo y Valladolid hay
10 trenes de ida y 9 de vuelta que paren en todas las estaciones.
Para que la gente use el tren debe pasar cada hora o menos.
Los fines de semana hay menos trenes y hace prácticamente imposible
desplazarse en tren entre las capitales de provincia y volver en el día,
algo que choca con la supuesta potenciación de turismo de interior en la
Región.
La despoblación y la dispersión poblacional de nuestra Región tiene entre
sus soluciones una apuesta por un ferrocarril público, social, sostenible
y asequible, no el de Alta Velocidad, éste atiende a otro tipo de
usuarios, no debería ser la prioridad en Castilla y León.
Muy diferente la situación de otras regiones donde la dinámica de uso del
ferrocarril es la contraria, pero también la política de compromiso con el
ferrocarril : nuevas líneas, nuevo material, más frecuencia, más servicios,
En Valladolid
Fuente: Secretario General TTyCC-CGT Valladolid Guillermo Martín
