En el centro de recepción de menores de Valencia el número de afectados ya supera la veintena, sin embargo la Conselleria es desconocedora de la magnitud del problema, al no haber realizado las pruebas que contempla el protocolo del Programa de Prevención y Control de la Tuberculosis de la Dirección General de Salud Pública.
Según las estimaciones de la sección sindical de la CGT, en estos momentos ya son doce los menores afectados, uno de los cuales habría desarrollado propiamente la enfermedad, mientras que el número de trabajadores afectados es al menos de nueve. Estas cifras contrastan claramente con las ofrecidas por la Conselleria en sus anteriores comunicados.
El principal motivo de la discrepancia está en la falta de una información completa, puesto que desde la Conselleria de Bienestar Social se ha desatendido el protocolo de sanidad que exige la realización de la prueba de Mantoux a quienes están en contacto con los afectados para detectar el alcance del contagio. El protocolo es muy claro al respecto y consonante con las medidas recomendadas para las enfermedades que requieren cuarentena, con la Ley de Inmigración y la Ley del Menor. Este protocolo fue mejorado recientemente, cuando en el año 2003 se dio una ampliación de la definición de lo que se conoce como “caso de tuberculosis” por parte de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica. Hay que hacer saber a la opinión pública que actualmente, la tuberculosis es en España una enfermedad de declaración obligatoria, en base a las recomendaciones y los acuerdos internacionales adoptados en el seno de la Organización Mundial de la Salud.
Si el funcionamiento de los centros de menores de la Conselleria fuera el que recogen estas Leyes y el protocolo de sanidad, los menores ingresados serían con rapidez evaluados para ver su estado de salud, sus necesidades sanitarias y si son portadores de enfermedades contagiosas. En tanto se completa esta evaluación, que debería tardar 24 ó 48 horas a lo sumo, el menor permanecería aislado del resto de menores. Esto es totalmente imposible de cumplir, puesto que el Centro de Recepción de Menores de Valencia no tiene personal médico, aunque figura desde hace tiempo en la Relación de Puestos de Trabajo del Centro, y los diversos centros no cuentan con una zona que permita el aislamiento. En el momento actual, algunos menores con medidas preventivas contra la tuberculosis han abandonado el Centro de Recepción, lo que puede dificultar el seguimiento de su estado de salud.
La sección sindical de la CGT ha remitido un escrito a la Consellera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, solicitándole que inicie cuanto antes la aplicación de las medidas preventivas que recoge el protocolo de sanidad, así como la Evaluación Inicial de Riesgos y la vigilancia de la salud de los menores y del personal que los atiende que recogen tanto la Ley del menor
como la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. En el escrito le recuerda que ha sido el incumplimiento de estas Leyes el que ha facilitado que se dé este problema, un problema que no es tanto el de la imagen de la Institución como el de riesgo potencial para la salud pública. Al mismo tiempo se le advierte de la posibilidad de estar incumpliendo acuerdos y obligaciones tanto nacionales como internacionales en relación a la actuación ante casos de tuberculosis.
Plan de Prevención y Control de la Tuberculosis y otros documentos :
Para más información, contactar con Benjamín Renovell, Secretario de Comunicación de CGT en la Generalitat Valenciana. 625 970 584
Fuente: Sindicat d’Administració Pública de València