La Confederación General del Trabajo (CGT) ha manifestado que, más allá de saber si las monjas se van o no, lo importante es determinar la calidad de servicio que se presta en la residencia San Luis. La secretaria general de este sindicato, Ángela Sánchez, reconoce la labor social prestada por las religiosas, pero afirma que ello no es óbice para denunciar los « problemas detectados y denunciados por un grupo de trabajadores que han antepuesto el bienestar de los ancianos a cualquier otra cosa ».
La CGT se hace eco del documento de la Inspección de la Junta de Andalucía en el que se reconocen deficiencias graves como la inexistencia de un plan de emergencia y evacuación ; carencia de iluminación de emergencia ; habitaciones con cables eléctricos y radiadores sin protección ; cuartos de aseo inadaptados para mayores o productos lácteos caducados. Sin embargo, el juzgado archivó la denuncia interpuesta al no hallar indicios de delito. El sindicato denunció ayer una infracción legal que implica el uso de subvenciones públicas de la Junta para fines distintos a aquellos para los que fueron concedidos. La CGT pide la actuación del Tribunal de Cuentas y la ejecución de una auditoria. CGT denuncia además deficiencias laborales e incumplimientos de convenio.
El sindicato denuncia que se ha politizado un servicio público por parte de todos los grupos políticos y cree necesario evitar que « cualquier tipo de fanatismo impida ver con racionalidad la realidad, para lograr corregirla ».
Por otra parte, la portavoz adjunta del PP, Luisa García Chamorro, ha realizado un llamamiento para que todos los motrileños acudan el próximo lunes a la manifestación, convocada por una plataforma de mujeres, en apoyo de las monjas Mercedarias de la Residencia de San Luis, como « agradecimiento respeto y admiración ». Una plataforma que sigue creciendo con la adhesión de colectivos como la Asociación de Comerciantes, Motril Histórico, Cofradía de la Soledad y la Hermandad de la Borriquita.
Fuente: EL IDEAL